Enterprise Manager 10g de Oracle: bueno, bonito pero no barato
La aplicación Enterprise Manager 10g de Oracle es seguramente la mejor colección de herramientas para la monitorización y mantenimiento del software empresarial que ofrece esta compañía, pero el coste de las muchas extensiones con las que se ofrece el producto la hacen prácticamente inalcanzable.
Oracle Enterprise Manager 10g Grid Control R4 es una potente plataforma de gestión que utiliza las ventajas del canal de venta de Oracle para proporcionar a los administradores herramientas de primera categoría para la monitorización, el manejo de alertas e información y la gestión de los trabajos y los compromisos de los sistemas y aplicaciones que Oracle supervisa.
Basándonos en las pruebas realizadas, recomendamos a los administradores que utilicen la aplicación Enterprise Manager para cuidar de las bases de datos de Oracle, los servidores, las aplicaciones Web de Oracle y toda la flota de productos de PeopleSoft, Siebel, JD Edwards y otras compañías. Para las organizaciones que dependen de los productos de Oracle, no existe probablemente una mejor colección de herramientas para la monitorización de los servicios colectivos y sistemas que mantienen a un negocio en funcionamiento. Sin embargo, como la mayoría de las soluciones de Oracle, esta funcionalidad se vende cara.
Aunque el producto básico Enterprise Manager 10g Grid Control R4 se ofrece sin costes añadidos de licencia con la mayoría de los productos Oracle, las distintas extensiones disponibles para el producto pueden incrementar vertiginosamente los costes de la solución. Además, la configuración que hemos probado incluía el paquete Application Server Diagnostics de Oracle, que cuesta unos 4.200 euros por CPU, y los paquetes de gestión de Oracle para Business Intelligence y Data Masking, que se venden a unos 7.000 euros por CPU. También probamos Root Cause Analysis Management Connector de Oracle, que ofrece información sobre las posibles causas de los fallos del servicio y cuesta unos 3.500 euros por CPU.
Oracle ofrece también un paquete de diagnóstico para las aplicaciones Middleware que no son de Oracle, a un precio de unos 4.200 euros por CPU. No hemos probado el producto con ningún servicio que no fuera de Oracle, cosa que queda pendiente para futuros análisis.
Enterprise Manager en el laboratorio
Durante las pruebas hechas con Enterprise Manager, establecimos cuentas de usuario y notificaciones, monitores listos y adaptados a nuestras necesidades, valores iniciales de las métricas de rendimiento, y alertas e informes de rendimiento, todo con el propósito de empezar a manejar el entorno Oracle Database 10g y Oracle Application Server que necesitabamos para esta prueba. Utilizamos la versión 10g de la base de datos de Oracle, pero Enterprise Manager puede también desenvolverse con la nueva versión 11g de Oracle, a pesar de la confusión que pueda generar la convención en el nombre del producto.
Después de configurar los monitores del sistema para Oracle Database 10g y Oracle Application Server, pasamos la mayor parte del tiempo creando modelos para definir la operación de servicios individuales o de grupos lógicos que en conjunto ofreciesen servicios discretos. Por otra parte, configuramos un grupo de hosts que en conjunto ofreciesen una aplicación Web alojada.
Incluso los administradores que todavía no están familiarizados con Enterprise Manager (el producto se lanzó por primera vez en 2005 y se puede probar gratis por un tiempo limitado en DVD, si se solicita a Oracle) no deberían tener muchos problemas al navegar por las herramientas del producto para descubrir y clasificar los objetivos de gestión que soportan. Más aún, como Enterprise Manager viene con miles de monitores preconfigurados, instalar el producto de primeras dependerá más del tiempo que se utilice para hacer las pruebas que a todo buen administrador le gusta hacer que de cualquier curva de aprendizaje que se necesite para poner a funcionar Enterprise Manager.
Una de nuestras mayores exigencias a la hora de utilizar una herramienta de gestión es que sea capaz de identificar eficientemente la raíz de cualquier problema en los sistemas y las aplicaciones que tengamos a nuestro cargo. Los falsos positivos, la identificación de una situación normal como un problema… son algunas de las cosas que consideramos poco eficientes. Repetir las alertas bien identificadas pero innecesarias, es otro ejemplo. En la prueba que llevamos a cabo con Enterprise Manager encontramos muy pocas redundancias de este tipo. Aún así, el entorno era bastante pequeño y el nivel de actividad de las aplicaciones es diferente al de los entornos actuales de producción. Dicho esto, damos bastante crédito a la eficiencia en la identificación de problemas encontrada en las pruebas de laboratorio para el modelado a nivel de servicio y la lógica de monitorización del producto.
Por ejemplo, fuimos capaces de crear monitores de nivel de servicio que se adaptaban a los distintos niveles de uso del sistema a lo largo del día. Así, el sistema permitía las subidas de producción controladas sin hacer saltar la alarma en la consola. En cambio, cuando forzamos a la base de datos a subidas que superaban los límites aceptables, estos mismos monitores de rendimiento enviaron los convenientes mensajes de alarma.