En el espacio aún quedan plazas hoteleras
La española Galactic Suite dice que quiere abrir un hotel en el espacio en el año 2012. El proyecto costará unos dos mil millones de euros, y además de la empresa Galactic Suite Proyects, que dirige Claramunt y Marsal Grifa, ya hay potentes inversores privados de los Emiratos Árabes y de Japón.
Las reservas de las habitaciones podrán hacerse a partir del año próximo, y el precio establecido es de tres millones de euro, no tan desorbitado si tenemos en cuenta que con esa tarifa se cubre el precio del viaje al espacio, de tres días, la preparación previa en una isla del trópico y actividades científicas en el complejo hotelero.
Al parecer, según comentó Xavier Claramunt a Reuters, el reto más grande para los arquitectos es diseñar un retrete y una ducha que desafíe la ausencia de gravedad: “acomodar las actividades más íntimas de los huéspedes no va a ser fácil”.
Además de este problema, Galactic Suite tendrá que confiar en su red de financiación para poder ser el primero en abrir sus puertas. La iniciativa no es nueva. La empresa estadounidense Bigelow Aerospace ya ha lanzado dos prototipos hinchables para una estación espacial privada y planea enviar su primer módulo habitable en 2012. La californiana Space Island Group, por su parte, también está trabajando en un concepto de hotel espacial, pero este proyecto aún no tiene fecha de ejecución.