En preparación la Ley Europea del Chip que busca aumentar la autonomía respecto a Asia
La UE prepara una Ley Europea del Chip que potencie la producción comunitaria de microchips frente a Asia.
Uno de los sectores industriales productivos claves de Europa, el automovilístico, lleva meses atravesando una situación crítica debido a la rotura de stock de microchips, una circunstancia que ha obligado a interrumpir la producción de vehículos, paralizar los procesos con ERTES y ver un acusado descenso de ventas. Todo por la falta de componentes que sigue sin acompasarse a la demanda desde el confinamiento inicia debido a la pandemia.
En Europa se concentra hasta el 37 % de la demanda mundial de procesadores para la industria automovilística, dado el importante peso de este sector en el continente, puesto que de media en el resto del mundo la demanda de es único sector es del 10 %.
En un intento por aliviar la solución fomentando la industria europea de fabricación de microchips, la Comisión Europea se ha fijado como objetivo aumentar la producción de microchips en la UE de manera que en computo global pase desde el 9 % hasta el 20 % para el año 2030.
Un propósito nada sencillo por la elevada inversión necesaria para construir y poner en marcha una fábrica de estos componentes, pero casi una necesidad dado que más del 70 % de los microchips que emplea la industria del automóvil proceden de Asia, en concreto de China, Corea del Sur y Taiwán.
Para ello se anuncia que a comienzos del próximo año se presentará la Ley Europea de Chips que fomentará el aumento de la capacidad de producción de las instalaciones ya existentes además de la construcción de nuevas megafábricas, en combinación con el estrechamiento de la cooperación con terceros países de manera que el suministro quede garantizado gracias a la diversificación.