En la espiral
La estrategia de capital que la UE ha completado viene a intensificar los recursos interactivos del Viejo Mundo y a facilitar alternativas al conocimiento.
Los contenidos digitales europeos pasan por una fase de enhorabuena ahora que la cúpula ubicada en Bruselas ha decidido aprobar, por amplia mayoría, la inversión de una suma de capital próxima a los 150 millones de euros. Así pues, el acceso, empleo y explotación de todos los recursos que pertenecen a Internet se van a ver ferozmente impulsados a nivel continental, y, evidentemente, global.
Bajo esta tesitura comunitaria, la información y el conocimiento digital experimentarán el grado de difusión y propagación que actualmente el Viejo Mundo requiere si, como siempre se ha dicho y repetido, quiere mantener posiciones ante la abrasiva competencia de EEUU, Japón y las emergentes economías asiáticas.
El resultado que se espera de la iniciativa online se resume en pocas palabras: avanzar en calidad interactiva y, por supuesto, dinamizar el esfuerzo conjunto de todos los agentes involucrados en el ámbito de los contenidos digitales.
De acuerdo con esto, sectores específicos y de elevado interés tales como el entorno público, de moda últimamente con la administración electrónica; el espacio cósmico que nos rodea, recuérdese la aventura que supone Marte y los avances turísticos/científicos que ya se cuecen; y, por otra parte, los datos y conocimientos encaminados a ampliar la esfera educativa y cultural, forman parte en estos comienzos de una espiral que -sin duda- logrará situar a Europa en el lugar que se merece contando con la participación de todos los que la integran.