Empujón al negocio de software de Lexmark al comprar Kofax

Aproximadamente 1.000 millones de dólares. Ésa es la cantidad que ha decidido poner sobre la mesa Lexmark para hacerse con los activos de Kofax. O, más concretamente, abonará 11 dólares por cada una de sus acciones, según se ha revelado.

¿Qué significa este movimiento? Kofax es una compañía californiana con tres décadas de vida que tiene el potencial suficiente como para potenciar el negocio de software de quien será su nuevo dueño a partir del segundo trimestre de este año, fecha en la que se cree que se podrá cerrar la operación.

Y es que, de acuerdo con los cálculos que han aportado sus responsables, la adquisición de esta compañía le permitirá multiplicar por dos las dimensiones actuales de su actividad de software empresarial.

“Kofax acelera el desarrollo de Lexmark de soluciones específicas de la industria al tiempo que amplía de forma inmediata nuestro alcance en el mercado medio, donde cada vez hay mayor demanda de tecnología para mejorar la gestión de la creciente cantidad de información no estructurada y mejorar la captación del cliente”, ha explicado al respecto el propio presidente y CEO de Lexmark, Paul Rooke.

“La adquisición de Kofax aumenta nuestras ofertas de primera clase, de modo que nuestros clientes pueden capturar, gestionar, acceder y actuar sobre su información de manera más eficiente”, señala Rooke, “y extiende a Lexmark por el mercado de aplicaciones de procesos inteligente de alto crecimiento”.

“Nuestros clientes”, continúa, “tendrán una amplitud de soluciones de hardware y software para conectar sus silos de información y automatizar sus procesos de negocio -permitiéndoles acceder a la información más relevante en el momento que lo necesiten para impulsar el negocio hacia adelante”.