Elon Musk nos avanza el Tesla D que presentará el 9 de octubre
“Casi ha llegado el momento de desvelar el D y algo más”.
Casi nos suena al “one more thing” (“una cosa más”) que popularizó Steve Jobs cuando en las presentaciones de los productos Apple, al final, aún aguardaba una sorpresa adicional. La fotografía no permite aventurar gran cosa más allá de que se trata de un vehículo cuyas líneas maestras (las escasas que se adivinan y se intuyen entre las sombras) no parece que vayan a ser convencionales ni a pasar desapercibidas.
Tesla Motors es un interesante y exitoso proyecto surgido del convencimiento personal (y de su millonaria fortuna personal, que eso siempre ayuda) de Elon Musk, inquieto ingeniero que vislumbró no un futuro sino un presente en el que los automóviles eléctricos tenían su hueco en igualdad de condiciones competitivas dentro del mercado de la automoción. Vehículos no excesivamente caros (aunque hablamos de un segmento de lujo), capaces de ofrecer el mismo servicio que los convencionales automóviles con motor de combustión interna, pero también y quizá por encima de todo, visualmente atractivos.
Ahora nos queda una semana de espera hasta poder descubrir qué significa esa D que da nombre al modelo y especialmente a qué se puede referir Musk con ese “algo más”. La D podría corresponderse con la berlina económica (en cuanto a precio de venta al público, en comparación con el resto de modelos de la marca Tesla) o también al rumoreado SUV (todocamino) de tamaño compacto. Ese “algo más” es el que continúa suscitando dudas.
El anuncio hecho por Musk a través de su Twitter, además, ha estado en vuelto en una simpática cadena de tuits alusivos a la propia redacción del anuncio. Literalmente se pueden entender sus palabras como “Ha llegado el momento de enseñar el P y algo más“, donde en inglés D se interpretaría por “dick” (pito, pene). El propio Musk ha respondido desde su cuenta en Twitter que la redacción con esa estructura semántica no tenía ninguna intención en ese sentido pero reconocía que se había estado “rulando de la risa” al darse cuenta de ello y al leer los tuits que han incidido humorísticamente sobre ese aspecto. Lo dicho, Tony Stark se queda corto.
vINQulo