La compra de Twitter por parte del empresario tecnológico Elon Musk se convertirá en una de las operaciones más importantes de la historia… si llega a producirse.
La Junta Directiva de la red social aprobó a finales de abril la propuesta de adquisición por alrededor de 44 000 millones de dólares. Musk está dispuesto a pagar 54,20 dólares en efectivo por cada una de las acciones ordinarias que todavía no son de su propiedad.
El también propietario de Tesla ya posee el 9 % de Twitter desde hace unas semanas y ahora quiere hacerse con su totalidad para “mejorar el producto con nuevas características, haciendo que los algoritmos sean open source para aumentar la confianza, derrotar a los bots de spam y autenticar a todas las personas”.
“Twitter tiene un enorme potencial”, asegura: “espero trabajar con la empresa y la comunidad de usuarios para desbloquearlo”.
El empresario cree que “la libertad de expresión es la base para que una democracia funcione” y que, en este sentido, Twitter ya “es la plaza pública digital donde se debaten asuntos vitales para el futuro de la humanidad”.
Pero de momento el proceso de adquisición está en pausa. Musk ha recurrido a su cuenta en la red social para comunicar que el acuerdo ha sido “suspendido temporalmente”.
¿El motivo? Quiere dirimir primero cuál es el porcentaje de cuentas falas o de spam que existen en Twitter. La compañía estima que el porcentaje de estas cuentas durante el primer trimestre de 2022 no llegó ni al 5 % del total de sus usuarios activos diarios monetizables.
La respuesta no parece convencer al autor de la oferta de adquisición, que explica estar “a la espera de detalles que respalden el cálculo de que las cuentas falsas/spam representan menos del 5 % de los usuarios”.
Musk ha propuesto fórmulas de cálculo como realizar muestras aleatorias de 100 seguidores de la cuenta oficial de Twitter en su propia plataforma y ha animado a otros usuarios a hacer los mismo para “ver qué descubren”. En su opinión, “si muchas personas obtienen resultados similares de forma independiente para el % de cuentas falsas/spam/duplicadas, será revelador”.
A pesar de las dudas, Elon Musk dice que está “todavía comprometido con la adquisición”, para la que cuenta con 46 500 millones de dólares en financiación, de los que 25 500 millones son compromisos de deuda por parte de Morgan Stanley Senior Funding y otras instituciones en concepto de financiamiento y préstamos de margen.
Esta paralización del acuerdo ha afectado a la cotización de Twitter, que el viernes cerró con una caída del 9,67 %. El valor actual de la acción es de 40,72 dólares.
Twitter reconoció durante su presentación de resultados trimestrales un error en el cálculo de usuarios que se ha arrastrado durante tres años.
Esto tiene que ver con la introducción de una función para vincular cuentas gestionadas por un mismo usuario.
Entre el primer trimestre de 2019 y el cuarto trimestre de 2021, la compañía ha estado contando como usuarios diarios activos todas las cuentas vinculadas a la principal. Esto supuso una sobreestimación sobre la realidad.
El fallo ya está corregido y, según ha informado Twitter, su base de usuarios diarios se sitúa en 229 millones.
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