“El objetivo del Partido Pirata es cambiar las leyes de propiedad intelectual en todo el mundo…Suecia, Europa y el resto del mundo, en este orden”, explica Flakvinge en una entrevista publicada por CNET News.
Fundado en enero de 2006, este singular partido recibió un amplio apoyo mediático en su país de origen, aunque no el suficiente como para conseguir entrar en el Parlamento. No obstante, Falkvinge cree que su organización canaliza a un número cada vez mayor de ciudadanos de todo el mundo que descargan contenidos de la web de forma ilegal porque creen que la industria discográfica ya les ha robado suficiente dinero con la excusa del copyright.
Hollywood ya acusó a The Pirate Bay (que no está afiliado al Partido Pirata), de ser una herramienta esencial para la piratería de archivos y en mayo de este año, el gobierno sueco cerró su sede durante varios días. A raíz de esto, el partido organizó dos manifestaciones en Estocolmo y Gothenberg, que tuvieron un eco considerable.
Aunque el proceso es lento, parece que el mensaje de Falkvinge va calando en los internautas de otros países. El pasado jueves, un grupo que se hacía llamar Partido Pirata de Estados Unidos anunció que buscaba apoyo para inscribirse como partido político en el estado de Utah.
Todo es posible, y como dice Falkvinge, “cuando alcancemos nuestra primera victoria política, por ejemplo, sentarnos en el parlamento, los piratas de todo el mundo sabrán que pueden hacer algo”.
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