El uso del móvil y la aparición de tumores cerebrales no están relacionados

Los científicos aseguran que los niveles de exposición de la población española a radiofrecuencias de antenas de telefonía móvil son “extremadamente bajos” e “inferiores a los establecidos como seguros”.

El Informe sobre Radiofrecuencias y Salud (2007-2008) realizado por el Comité Científico Asesor en Radiofrecuencias y Salud (CCARS) pone de manifiesto que no se ha identificado ninguna relación entre el uso móvil y la aparición de tumores cerebrales, aunque advierte de que todavía no hay datos suficientes de su efecto en los niños.

Además, los científicos creen que los niveles de exposición de los españoles a las radiofrecuencias de las antenas de telefonía móvil son “extremadamente bajos”, y que se mantienen inferiores a los “establecidos como seguros”. Éstos están casi 50 veces por debajo de los límites que fija la ley, en torno a los 450 microvatios por centímetro cuadrado.

La limitación actual se basa en las investigaciones que se han llevado a cabo estudiando los efectos de las radiofrecuencias en las células humanas, aunque los científicos advierten que si se encuentran evidencias científicas de algún efecto biológico “los límites tendrán que ser revisados”.

La mala imagen que se tiene en la sociedad sobre las emisiones y los efectos en el cuerpo humano no se corresponde con los datos científicos, por lo que los medios de comunicación “tienen un papel decisivo sobre la información que se transmite de los avances relacionados con tecnologías y nuevos desarrollos”, opinan los responsables del estudio, según informa EFE.

“Esperamos que el informe pueda llegar a responsables políticos, defensores del consumidor y otros actores para que sirva como guía a la hora de tomar decisiones y para poner en marcha nuevas investigaciones relacionadas”, han aseverado.