La curiosa cúpula, con un espesor de 8,25 centímetros y un diámetro de 1,44 metros es capaz de llevar cómodamente en su interior a dos personas. Por otro lado, el submarino tiene unas baterías que permiten hasta 6 horas de navegación, aunque sin duda lo más interesante es el JoyStick que lleva el cual permite controlarlo con precisión. ¡Por fín las largas horas delante de ese juego que usaba un Joystick sirven para algo!. Por si esto fuera poco, lleva toda la instrumentación necesaria para tener la navegación controlada (al igual que con cualquier otro submarino) como: un termómetro, un higrómetro, un barómetro y un receptor de GPS, sin olvidarnos de la radio VHF, la cual nos permite comunicarnos con la superficie. Por último pero no por ello menos importante, lleva unas luces halógenas de 150W, las cuales iluminan lo suficiente para grabar vídeos y hacer fotos de la zona donde estemos sin excesiva dificultad.
¿Su precio? Bueno, más vale que tomes aire antes de leerlo (a no ser que seas un multimillonario excéntrico): 2.000.000 $ (sí, dos millones de dólares, algo más de un millón y medio de euros al cambio actual). [Hammacher Schlemmer vía Uncrate] — Fco. José Cañizares.
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