Tras filtrarse que el nuevo smartwatch de Microsoft vendría en octubre, ahora informaciones publicadas por el analista Paul Thurrot, recogidas por la web The Verge, sostienen que el wearable de la compañía de Redmond podría seguir la estela de la gama Samsung Gear y ser una pulsera de fitness con múltiples sensores que servirían para monitorizar la frecuencia cardíaca.
De esta manera, se descarta la posibilidad de que sea un smartwatch el nuevo producto de la compañía, tal y como se esperaba en un principio. El nuevo dispositivo de la firma surcoreana estaría enfocado más al mundo del deporte y de la salud, pero eso sí con un sistema de notificaciones conectado al smartphone del usuario.
En un principio el modelo que la firma presente en octubre seguirá la estela del Samsung Gear Fit y contará con aspectos técnicos cercanos al ecosistema de los dispositivos cuantificadores y de las pulseras deportivas. Aún se desconoce el nombre y familia al que pertenecerá, pero si se espera que esté pensado para competir con los wearables que lanzarán Apple y Google antes del fin de año.
Uno de los aspectos más destacados del nuevo dispositivo será su capacidad de integración con diferentes sistemas operativos. Más allá del Windows Phone, el software de la casa, se espera que sea compatible con iOS y Android y pueda usarse a su vez con múltiples aplicaciones de terceros. En lo que respecta al precio del wearable este podría rondar los 199 euros, según publica la web especializada.
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