El smartphone Huawei Mate S propone una nueva etapa en la relación hombre-máquina

Sony no es la única compañía que ha anunciado smartphones nuevos con motivo de la feria IFA 2015 que se celebra semana en Berlín, la china Huawei también ha aprovechado la programación de este evento para desvelar el que será su próximo buque insignia.

Hablamos del smartphone Mate S con sistema operativo Android, panel AMOLED FHD de 5,5 pulgadas, cámara trasera de 13 MP, cámara frontal de 8 MP, posibilidad de Dual SIM, carcasa metálica y superficie curvada. Un smartphone que, más allá de estas especificaciones, se desmarca de otras propuestas del mercado por sus capacidades táctiles.

Y es que además de haber sido diseñado en versiones con almacenamiento interno de 32 GB y 64 GB, que están valoradas en 649 euros y 699 euros, respectivamente, este terminal cuenta con una versión Force Touch.

Incluir esa tecnología le permitirá a su pantalla soportar la presión para dar paso a diferentes acciones, desde aplicar zoom sobre el contenido que se muestra a abrir apps o incluso funcionar como báscula.

Por su parte, la magia de Knuckle Sense 2.0 está preparada para que los usuarios usen sus nudillos en otras misiones, ya sea para cortar imágenes, capturar fragmentos de vídeos y hasta dibujar letras a modo de accesos directos a ciertas actividades. Así, el trazo de una “c” implica por defecto la activación de la cámara y el de la “m”, la reproducción de música.

Otra particularidad que define a Mate S es el Fingerprint Sense 2.0 incluido en su estructura, que sirve para algo más que desbloqueos o autorizar pagos. Según explican sus responsables, el reconocimiento de la huella ha sido diseñado para tomar fotos en forma de selfies, contestar llamadas, gestionar notificaciones y autorizar otras tareas como desplazamientos o el rechace de una alarma.

“Nuestro objetivo al diseñar Huawei Mate S era desarrollar un smartphone que ofrecise una experiencia personalizada”, comenta al respecto Richard Yu, CEO de Huawei Consumer BG.

“Huawei Mate S”, señala Yu, “se basa en conocimiento que reunimos sobre la interacción humana”. Y, “en particular”, en el hecho de “que el tacto es una acción natural que tomamos para entender e interactuar con nuestro mundo”.

Eso implica que “redefine cómo incorporamos la tecnología táctil en nuestros smartphones, adoptando un enfoque revolucionario para controlar la pantalla al tocarla y marcando el comienzo de una nueva era para la interacción hombre-máquina”, en opinión de este directivo.