El reacondicionamiento da una nueva vida a los dispositivos electrónicos
El ahorro económico y la sostenibilidad son dos de los argumentos que están impulsando el mercado del reacondicionamiento de dispositivos electrónicos.
Vivimos en una sociedad de consumo, en la que se ha instaurado una cultura de ‘usar y tirar’. Sin embargo, algo parece estar cambiando. Por ejemplo, estamos viendo un auge de plataformas que apuestan por un modelo basado en el disfrute de bienes y servicios mediante el pago por uso, desplazando el viejo paradigma de propiedad. Asimismo, las apps de compraventa de productos de segunda mano cada vez tienen más usuarios.
El crecimiento del mercado de productos reacondicionados es una muestra más de esta nueva mentalidad. “Un estudio de IDC explica que la venta de los dispositivos usados crecerá a un ritmo anual superior al 13,6% durante los próximos años, para alcanzar los 332,9 millones de unidades vendidas en 2023, frente a los 175,8 millones de 2018 o los 206,7 millones de unidades en 2019. Según el mismo informe, el crecimiento del negocio superó el 17% en 2019”, apunta Jacqueline Pistoulet, directora de Marketing de Smaaart en España.
Además, señala algunos hitos que ponen de manifiesto que “se está convirtiendo en una tendencia global”. “Según la firma de análisis Counterpoint, en 2018 se produjo un momento clave para el sector. Por primera vez, el mercado de teléfonos reacondicionados creció más rápido que el de los móviles nuevos. Es más, el mercado de móviles nuevos sufrió un descenso del 1%, mientras que el de móviles reacondicionados creció un 10%. Año tras año, esta tendencia va en aumento, lo que demuestra que la población está cada vez más concienciada de la importancia de apostar por la economía circular”.
Así pues, Jaume López, cofundador y director de desarrollo de negocio de MercadoIT, prevé “un aumento exponencial de este mercado” en los próximos años. “Los dos sectores entre los que transita el reacondicionamiento de equipos, el tecnológico y el de la sostenibilidad, están al alza. Además, todo apunta a que la legislación impulsará y fomentará este tipo de productos”.
Ahorro y sostenibilidad
“El reacondicionamiento de equipos tiene dos ventajas principales: un menor coste de adquisición y su contribución a la mejora del medio ambiente y la sostenibilidad. Al dar una segunda vida a estos dispositivos, conseguimos impulsar el modelo circular, por lo que se ha empezado a apostar en los últimos años como solución al actual modelo caduco de ‘usar y tirar’. Además, cabe destacar que estos equipos reacondicionados son más estables, porque se han corregido los errores que tenían cuando salieron al mercado”, declara David Llusar, cofundador y director técnico de MercadoIT.
Respecto al ahorro económico, Pistoulet señala que “los usuarios pueden encontrar móviles de última generación de marcas como iPhone, Samsung y Huawei entre un 30% y 50% más baratos que nuevos”.
En cuanto al argumento de sostenibilidad, remarca que “el 80% del impacto en CO2 de un teléfono es debido a su fabricación”. “Por cada móvil reacondicionado, se ahorra la emisión de 52 kg de CO2, ya que reacondicionar produce 8 kg de CO2, frente a los 60 kg de un móvil nuevo; y se evita la extracción de 56 kg de materias primas”, especifica.
Proceso seguro
El reacondicionamiento conlleva un proceso para asegurar que los dispositivos ofrecen todas las garantías. “Reacondicionar es un proceso que supone varias etapas para meter de nuevo en el mercado un producto 100% funcional con una garantía. Reacondicionar en Smaaart supone borrar los datos personales del antiguo propietario y certificarlo, auditarlo en 45 puntos de control, repararlo, limpiar y asegurar una higiene perfecta antes de volver a prepararlo para la venta”.
Igualmente, Aura Arteta, responsable de Economía Circular de Telefónica, especifica que “los equipos electrónicos que entregan los clientes pasan por un taller de reacondicionamiento, donde se realizan pruebas para determinar cuáles de ellos pueden tener una segunda vida, en función de su estado, los materiales que contienen y su antigüedad”. Además, puntualiza que “antes de darle un segundo uso, estos equipos pasan por un proceso de eliminación de datos, reparación e higienización”.
Llusar insiste en la confiabilidad que ofrecen los dispositivos adecuadamente reacondicionados y reintroducidos al mercado. “Garantizamos una larga vida útil de estos equipos de, en ocasiones, hasta 10 años”, anota Llusar. Asimismo, la portavoz de Smaart afirma que sus teléfonos “son 100% funcionales, tienen una garantía de 12 a 24 meses y se entregan con accesorios nuevos: cargador, cable USB, auriculares y extractor SIM”.
Todo tipo de dispositivos
“Cualquier dispositivo electrónico es susceptible de ser reacondicionado, aunque normalmente el mercado se centra en tres tipos de dispositivos: teléfonos móviles, ordenadores —portátiles y de mesa— y tablets”, indica Pistoulet.
Pero el reacondicionamiento no acaba ahí. “Hay multitud de dispositivos electrónicos que son susceptibles de reacondicionarse. En nuestro caso, la mayoría de nuestros reacondicionamientos son equipos para redes informáticas, como routers y switches. Además, se suelen reacondicionar muchos servidores y unidades de almacenamiento. Y también se pueden reacondicionar dispositivos de uso individual, como portátiles, tablets o teléfonos móviles, entre otros”, aclara Llusar. Asimismo, los operadores de telefonía también recuperan y reacondicionan equipos como smartphones, tablets, routers, decodificadores o mandos de televisión.
Particulares y empresas
Los usuarios de dispositivos reacondicionados dependen del tipo de producto del que hablemos. Cuando se trata de productos de gran consumo, como smartphones, tablets y ordenadores, los compradores suelen ser particulares. “Generalmente, los millennials son los que más tienden a vender artículos que no utilizan y comprar otros más sostenibles, aunque la compra de dispositivos reacondicionados se está convirtiendo en una tendencia en todos los grupos de edad. Una de las razones que explica este fenómeno es que los smartphones de última generación tienen precios desorbitados, habitualmente de más de 1.000 euros, que muchas personas son reacias a pagar”, comenta la responsable de Smaaart.
También es una buena opción para equipar a los niños. Desde edades cada vez más tempranas, los niños reclaman smartphones y tablets. De hecho, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 69,5% de los niños y adolescentes de 10 a 15 años cuenta con un móvil. Muchas familias son reacias a realizar un gran desembolso por este tipo de equipos, dado el riesgo de pérdida o avería en manos de los más pequeños, por lo que están encontrando una solución económica en los productos reacondicionados. No en vano, Smaaart asegura que sus ventas se disparan un 34% al final del verano y al comienzo del curso escolar.
En el caso de los equipos de redes informáticas, los clientes suelen ser empresa. “En especial, compañías que tienen un consumo de IT muy grande. Un gran consumidor son los integradores que proporcionan servicios informáticos a otras empresas”, apunta el director de Desarrollo de Negocio de MercadoIT.
Apuesta de los operadores
Los operadores de telecomunicaciones también están apostando por el reacondicionamiento. Por ejemplo, Telefónica cuenta con iniciativas como el programa ‘Movistar Buyback’, a través de la app SmartBuy, reembolsando el valor del móvil antiguo cuando se adquiere uno nuevo y dando un nuevo uso al viejo terminal. También efectúa el reacondicionamiento y reutilización de routers y decodificadores procedentes de los hogares de sus clientes. Asimismo, la compañía vende una selección de smartphones de segunda mano reacondicionados, ya sea a través de la tienda online de Movistar o de Tu.com, su plataforma de ecommerce.
“Gracias a estas iniciativas, sólo en 2020, del total de equipos electrónicos recogidos de nuestros clientes en todo el grupo, cerca de un 57% se ha reacondicionado y reutilizado; y un 43% se ha destinado a reciclaje. Es decir, que Telefónica ha conseguido dar una nueva vida a 4 millones de unidades de equipos de comunicaciones —más de 1,5 millones de equipos sólo en España—, un 541% más que en 2015, evitando de esta forma la emisión de 3.855 toneladas de CO2”, detalla Arteta.
Vodafone también está impulsando la recompra de dispositivos de sus clientes. “Se ofrecen descuentos por los dispositivos a través de alianzas con empresas especializadas, facilitando la reintroducción de estos equipos en el círculo económico. Una vez reacondicionados, pueden ser utilizados en países en desarrollo o emergentes, lo cual tiene beneficios sociales y medioambientales. Existe también un proceso para recoger los dispositivos de banda ancha fija y TV de los clientes tras su baja, evitando la fabricación innecesaria de nuevos equipos”, se explica desde la compañía.
Un ejemplo es su programa ‘Reestrena’. “Los clientes pueden ahorrar al comprar un nuevo móvil, entregando uno antiguo, independiente del operador que sea. Gracias a este programa, los clientes pueden llevarse hasta 100 euros adicionales a la valoración del dispositivo, que se ingresa en cuenta bancaria”, detalla el operador.
Por su parte, Orange promueve la compra de teléfonos reacondicionados en sus tiendas. También cuenta con el servicio ‘Compramos tu móvil’, a través del que propone a sus clientes la entrega de los móviles usados a cambio de descuentos o ventajas en la adquisición de un nuevo terminal. Además, está impulsando diferentes iniciativas de sensibilización y recuperación de terminales. La compañía afirma que las acciones realizadas en la última década han permitido la recogida de más de 15 millones de teléfonos en todos los países en los que está presente. Sólo en España, ha recuperado más de 2 millones de equipos en los dos últimos años, incluyendo routers y móviles. En concreto, ha recogido más de un millón de routers, de los que más del 95% han sido reacondicionados.
Además, el reacondicionamiento forma parte de su plan estratégico Engage2025. Dicho plan establece el objetivo de dar una nueva vida a más del 90% de los terminales fijos recogidos. Y si hablamos de móviles, la meta para 2025 es que el 10% del volumen de sus ventas proceda de equipos puestos a nuevo. Asimismo, el plan estratégico contempla que el 20% de las inversiones presupuestadas para equipos de red y TI se utilicen para comprar equipos reacondicionados.