El hacker de 22 años viajaba con sus amigos en un coche hacia la ciudad de Austín, lugar de celebración del congreso SXSW, para disertar sobre “La frontera final de la Ingeniería Inversa”, cuando fue detenido en un control policial.
Los agentes tenían perros para detectar la droga que alertaron sobre la presencia de la marihuana, de la que encontraron una cantidad equivalente a 4,25 gramos.
Según informan desde ZDNet, la posesión de esas cantidades lleva aparejada la citación ante un juez pero nunca el arresto, aunque en este caso todo apunta a que esa medida se debió a que los policías valoraron la droga en 800 dólares, algo que según Geohot, está muy por encima de los 15 dólares que pago por ella.
Finalmente, el hacker fue acusado de delito grave relacionado con las drogas y fue puesto en libertad tras depositar 1.500 dólares de fianza.
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