El PLC doméstico llega donde no lo hace tu WiFi
Aunque la tecnología no haya triunfado a gran escala (lástima) varios fabricantes de soluciones de conectividad y otros tipos de dispositivos están apostando por aprovecharla en entornos más reducidos. Es el caso de Belkin Powerline PLC AV, que se puede conseguir en varios formatos y que nosotros hemos analizado como un pack con dos módulos PLC, uno que actúa como emisor y otro como receptor, para aprovechar nuestra conexión ADSL de forma más eficiente.
La instalación de estos módulos es muy sencilla: tan sólo hay que conectarlos a la red eléctrica y al router por un lado, y por otro a la red eléctrica (de nuevo, lógicamente, ya que los datos se transmiten por ahí) y a nuestro PC o portátil situado a una distancia respetable del router o fuente de las comunicaciones.
No hay que realizar modificación alguna en la configuración de nuestra red local, ya que una vez conectado el emisor se comporta como un punto de acceso más: coge una IP (siempre que tengáis activado DHCP) y se dedica a servir como punto de acceso para el módulo receptor, que en cuanto está enchufado detecta a su compañero y coge su propia IP a su vez.
A partir de ahí todo funciona como una seda: en mis pruebas pude comprobar que el rendimiento de la tecnología PLC era superior al de la red WiFi 802.11g, sobre todo cuando las distancias en la oficina o casa son grandes y el alcance de la señal WiFi no es tan destacable.
La idea de Belkin y otros fabricantes es genial, porque podemos utilizar estos módulos no sólo para conectarnos desde un portátil, sino también para conectarlos a la consola o Media Center del salón y garantizar unas tasas de transferencia muy respetables. El precio de este pack es de 99,99 euros, y lo cierto es que puede ahorrar muchos problemas de conexión.
