El móvil de empresa, en peligro de extinción

Peligros y retos

Uno de los principales peligros que se asocia al fenómeno BYOD es la posibilidad de que los trabajadores que se marchan de una empresa puedan llevarse con ellos información corporativa muy valiosa. En este sentido, Luis Corrons explica que “para los servicios en la nube, el riesgo no es grande”, pero “si hablamos de utilizar dispositivos externos para conectarlos a la red de las empresas, si no tienen unas políticas de seguridad serias puede suponer un peligro demasiado grande para asumir”.

Éste es un factor que también ha tenido en cuenta el servicio Dual Persona de VMware Horizon Mobile, tal y como apunta Alejandro Solana: “Gracias a la separación entre el perfil personal y el profesional, cuando un empleado deja una empresa, o si pierde o le roban su dispositivo, en todo momento se tendrá a salvo la seguridad de la información corporativa de la mejor manera, además de no permitir el acceso al perfil personal”.

Volviendo al estudio ‘Horizons’ de Cisco, las empresas y empleados del sector TIC estadounidense coinciden en que estos retos serán superados rápidamente. De hecho, el 76% de los encuestados considera el fenómeno BYOD únicamente como el primer paso de los muchos que habrán de dar las compañías en materia tecnológica. Así, se espera que el número de dispositivos móviles conectados por cada trabajador alcance los 3,3 en 2014 (hoy es de 2,8) y que las iniciativas en movilidad consuman el 20% de los presupuestos corporativos destinados a las TIC en 2014 (por el 17% actual).

Y aunque el uso de dispositivos móviles en los entornos personal y laboral se concentra actualmente en los smartphones, pronto se extenderá a las tabletas, ya que no sólo ofrecen autonomía, explica Luis Corrons, sino que, además, “permiten una cómoda edición de documentos y hasta realizar presentaciones”. Por esta razón, el 80% de las 100 mejores compañías del mundo para trabajar, según la revista ‘Fortune’, ya han iniciado proyectos para incluir el iPad en sus procesos de negocio.

De hecho, se espera que las tabletas se extiendan a la mayoría de departamentos de las empresas este mismo año, tras su irrupción inicial en el ámbito directivo. “Hay que tener en cuenta que cada vez más las compañías utilizan servicios en la nube, por lo que cualquier dispositivo con conexión a Internet puede ser válido para trabajar en este entorno”, explica Corrons. Pero los trabajadores tecnológicos no se quedan ahí. Según el estudio de Cisco, el 69% confiesa que también les gustaría usar sus aplicaciones personales (redes sociales, mensajería instantánea, etc.) en el trabajo. Pero ése es ya otro tema.