El Intel Core i7 impresiona en las primeras pruebas de rendimiento
La nueva serie de procesadores, así como los chipset x58 llegarán a finales de mes y permitirá a los proveedores de soluciones TIC aumentar la potencia de sus equipos.
El banco de pruebas
Intel nos ha proporcionado un kit para realizar las pruebas pertinentes, que incluye un procesador Nehalem (el Core i7-965, que costará unos 999 dólares, veremos a qué precio en euros), una placa base Intel DX58S0 (con el anteriormente comentado chipset Smackover) y un disco duro SSD Intel SSDA2MHO80G. Nosotros le hemos añadido 4 GBytes de memoria DDR3 (cuatro módulos de 1 GByte cada uno). En el apartado gráfico, la tarjeta seleccionada ha sido una NVIDIA Quadro FX1700, ideal para entornos de estaciones de trabajo gráficas. Por último, el sistema operativo que en esta ocasión ha sido Windows Vista Ultimate de 64 bits.
Para llevar a cabo las pruebas, utilizamos el test de rendimiento PassMark PerformanceTest (para 64 bits).
En nuestra primera serie, con todos los parámetros por defecto, el sistema obtuvo un índice de 2.412,2, que resulta realmente impresionante. Para que sirva de referencia, hemos comparado estos resultados con los recientemente obtenidos en el análisis de una estación de trabajo HP XW6600 Dual Xeon y el resultado fue en este caso de 2.892,6. Este equipo incluía la misma tarjeta gráfica pero aportaba 8 GBytes de memoria y, lógicamente, un sistema de doble procesador Xeon.
En el siguiente paso decidimos experimentar haciendo overclocking sobre el Nehalem, aumentando la velocidad de reloj de los 3,2 GHz (los que ofrece de fábrica) a los 3,6 GHz. De esta forma, conseguimos aumentar visiblemente la puntuación obtenida anteriormente: 2.701,3, lo que supone tan sólo una reducción del 7% en el rendimiento con respecto al sistema basado en Xeon.
Estas cifras son realmente interesantes, toda vez que estamos comparando un solo procesador de 4 núcleos (Nehalem), con dos procesadores de 4 núcleos cada uno (Dual Xeon).
Durante las pruebas trabajando a 3,6 GHz (overclockeado), el sistema se comportó de manera completamente estable. Eso sí, todo intento de ir más allá de esta cifra fue fallido, con pantallazos azules o fallos de arranque, entre otros.
De esta forma, Nehalem demuestra que su tecnología de fabricación en 45 nanómetros es altamente competitiva, mientras que los precios, según Intel, son asequibles (aunque la verdad es que no hay muchos usuarios avanzados y corporativos que puedan permitirse el lujo de adquirir un procesador por 999 dólares). Lo que ocurre es que dos procesadores Xeon son bastante más caros que éstos y, además, las placas base con dos sockets también disparan el presupuesto.
En cualquier caso, los proveedores de soluciones deberán comenzar a tener en cuenta la utilización de este nuevo sistema de Intel para sistemas de alto rendimiento, ya que les permitirá obtener mejores márgenes a la hora de construirlos.