El iMac de Apple cumple diez años

Su original diseño rompió con la estética establecida en esas fechas y no sólo eso. Fue el primero en prescindir de las disquetera y ofrecer un nuevo formato llamado USB en una época de puertos serie y paralelo con inmensidad de cables saturando el escritorio.

El modem integrado y la conexión Ethernet ofrecida contribuyeron a alimentar la campaña de marketing de su facilidad de conectarse a la Red frente al PC equivalente con Windows.

Su diseño original incluía un procesador PowerPC a 233 MHz, 32 Mbytes de RAM, FSB a 66 MHz, una gráfica ATI Rage IIc con 2 MB de VRAM, 4 GB de disco duro, un CD-ROM a 24x y un monitor (todavía CRT) de 15 pulgadas y 1024×768 pulgadas de resolución.

Su éxito fue tremendo y varió de forma radical la marcha y los números rojos que agobiaban las finanzas de la compañía. Apple pasó de unas pérdidas de 878 millones de dólares en 1997 a un beneficio de 414 millones en 1998.




Como vemos, el cambio del iMac en estos diez años ha sido radical, tanto en diseño como en uso de materiales. Sin embargo uno de los cambios más relevantes fue la incorporación de procesadores Intel que ocurrió en enero de 2006 con el lanzamiento del iMac Core Duo. De esta manera el iMac se convirtió en el único ordenador que ejecutaba de forma nativa Mac OS X, Windows y GNU/Linux.

Felicidades iMac.

vINQulos
electronista