El gasto TI mundial mejorará en 2022, pero menos que en 2021

Gartner espera una inversión de más de 4,5 billones de dólares, que es un 3 % interanual más. El segmento de los dispositivos sufrirá una disminución del gasto del 5 %.

Las empresas apuestan por la tecnología para seguir siendo competitivas, incluso en el actual entorno de dificultad económica agravado por la invasión rusa de Ucrania.

El año paso el gasto en TI superó los 4,4 billones de dólares. Para este 2022 se esperan más de 4,5 billones, lo que significaría un aumento del 3 %, de acuerdo con las previsiones publicadas por la consultora Gartner.

Sus analistas creen que habrá mejoría en todos los segmentos excepto en dispositivos, donde el gasto se reducirá un 5 %.

De hecho, aunque el gasto mundial en TI crecerá este año, lo hará “a un ritmo mucho más lento que en 2021”, como bien señala Gartner, “debido a los recortes en el gasto en PC, tabletas e impresoras por parte de los consumidores“. En 2021 los dispositivos habían registrado crecimiento de doble dígito, con un 16 % más de gasto que en 2020, cuando se inició la pandemia de coronavirus.

Donde sí habrá mejoría es en los servicios. En esto tiene que ver el encarecimiento de los precios y los problemas en el transporte, que provoca que las empresas prefieran pasar de un modelo de propiedad a otro basado en el servicio. El gasto en la nube se disparará este año más de un 22 %.

La consultoría e implementación en la nube y los servicios administrados en cloud acumularán 255 000 millones de dólares, elevando el segmento de servicios de TI por encima del 6 %.

Al mismo tiempo, la demanda de servicios en la nube impulsará la parte de servidores, que crecerá un 16,6 %, con los hiperescalares invirtiendo en su centros de datos.

El gasto en sistemas para centros de datos será, de hecho, el segmento de todos los que componen el gasto en tecnología (dispositivos, servicios TI, servicios de comunicaciones, software y sistemas de centros de datos), el que mayor crecimiento registre, con más de un 11 %.

Otro fenómeno que condiciona el mercado es la escasez de habilidades, tanto a la hora de atraer como de retener talento. Para ofrecer salarios competitivos, los proveedores de servicios de tecnología están aumentando los precios de TI, lo que impulsará un mayor gasto en servicios y en software. El gasto en software aumentará un 9,6 % este año.

“Los CIO están utilizando más servicios de TI para ayudar en la falta de personal de TI cualificado. Las tareas que requieren conjuntos de habilidades más bajos tienden a subcontratarse a empresas de servicios administrados para aliviar en cuestión de tiempo del personal, mientras que el trabajo estratégico crítico, que requiere habilidades de alto nivel que muchas empresas no pueden obtener, será realizado cada vez más por consultores externos”, explica el experto John-David Lovelock.

Por último, las inversiones en servicios de comunicaciones sólo variarán un 0,4 % al alza a lo largo de 2022 respecto a lo vivido en 2021.

“No se espera que los niveles actuales de volatilidad que se observan tanto en la inflación como en las tasas de cambio de divisas disuadan los planes de inversión de los CIOs para 2022”, concluye Lovelock. Es más, “las organizaciones que no invierten a corto plazo probablemente se quedarán atrás a medio plazo y correrán el riesgo de existir a largo plazo”.

El caso de España

España aportará unos 51 400 millones al gasto TI este año, según previsiones de IDC, que pronostica una mejoría interanual para nuestro país del 3,5 %.

En este caso los Fondos Next Generation UE, la readaptación del entorno laboral en torno a la experiencia de las personas y una mayor preocupación de las organizaciones por la sostenibilidad ampliarán la contribución de la digitalización al PIB.

Un 67 % de las empresas españolas espera mantener o incluso aumentar su gasto en IaaS durante 2022. Mientras, las inversiones en tecnología de inteligencia artificial deberían crecer un 28 %.

Si todo va según lo previsto, un año más tarde, en 2023, la mitad de las compañías debería estar generando en España más del 40 % de sus ingresos a partir de productos y servicios digitales.