El fundador de LimeWire reconoce que estaba equivocado
El empresario está siendo juzgado por un caso del año 2006, en el que la industria discográfica americana, conocida bajo las siglas RIAA, le acusa de infringir las leyes sobre derechos de autor con su programa LimeWire.
Lo cierto es que Gorton ha declarado que sabía que los usuarios lo usaban para piratear canciones, pero también ha afirmado que hasta ahora no ha sido consciente de que con su servicio estuviera incitando a otras personas a violar los derechos de autor.
Resumiendo, Gorton no veía el pirateo como algo ilegal y por eso decidió seguir adelante con LimeWire, hasta que no tuvo más remedio que cerrar el servicio el pasado mes de octubre.
Los jueces han declarado a Gorton culpable de incumplir las leyes de copyright pero todavía no se ha fijado la cantidad exacta que deberá pagar, cuya cifra estará entre los 7 millones de los dólares y los 1.400 millones de dólares.
Los abogados de las discográficas han mostrado en el juicio una tabla que manejaba LimeWire, en la que se dividía a los usuarios en función de su nivel de piratería entre “Piratas Incondicionales”, que suponían el 25% del total, “Moralmente Persuadidos”, que contabilizaban otro 25 por ciento, “Legalmente Inconscientes”, que llegaban al 20 por ciento, y por último un 30 por ciento que empleaban el servicio para probar canciones.
vINQulos