El fin de la batalla legal entre Samsung y Nokia cambia las expectativas de la compañía finlandesa
Finalmente parece que la batalla de patentes entre Nokia y Samsung llegar a su fin tras un par de años en disputa. Pero parece que la cifra final no ha convencido a los analistas y se espera una rebaja de los pronósticos.
Hace un par de años, Nokia decidió llevar a Samsung a los tribunales, al considerar que lo que estaban cobrando por las licencias de patentes no era justo. La Cámara de Comercio Internacional avisó hace unas semanas que para finales de enero de este año darían su veredicto, y finalmente el resultado parece no haber cumplido las expectativas del mercado.
La solución supone que Samsung pagará varios cientos de millones de euros a Nokia, lo que permitirá que las ventas de la unidad de patentes de Nokia lleguen a los 1.020 millones de euros en 2015, casi el doble de los 578 millones de euros que obtuvo en 2014.
Esta cifra supone que anualmente Nokia percibirá unos 800 millones de euros anuales, por debajo de los 900 millones que esperaban los analistas. Con esto finalmente Nokia no consigue que sus patentes puedan obtener los mismos resultados que, por ejemplo, Ericsson ha obtenido recientemente de Apple, llegando a los 1.200 millones de euros anuales por patentes, y ha llevado a que la cotización de Nokia baje un 10%.
Nokia también tiene más disputas legales con otras compañías, como la también coreana LG, y en los próximos años se espera que firme un nuevo contrato de licencias con Apple. Nokia espera que durante el periodo de 2016 a 2018, la compañía obtenga de sus negociaciones legales 1.300 millones de euros, por lo que habrá que esperar al resto de negociaciones para saber si los analistas tendrán que volver a cambiar sus pronósticos.