El DNI electrónico comienza su cuenta atrás
El documento, cuyo empleo arrancará en 2006, incluirá la firma electrónica del titular y un chip con la versión digital de los datos que contiene el modelo tradicional.
La implantación del futuro DNI electrónico, que está previsto que comience a utilizarse en una experiencia piloto a comienzos de 2006 (un año de retraso frente a lo inicialmente previsto), ha comenzado ya su cuenta atrás con la finalización del plazo de presentación de ofertas para suministrar los componentes necesarios.
El Gobierno tiene previsto que el DNI electrónico, que incorporará la firma electrónica del titular y un chip en el que se albergará la versión digital de los datos que contiene el modelo tradicional, se realice en material de policarbonato, según explicó el pasado 1 de diciembre en el Senado el ministro del Interior, José Antonio Alonso.
La diferencia del chip del DNI con otros, como el de las tarjetas telefónicas, es que incorporan un criptoprocesador, un pequeño ordenador para autentificar al dueño y la firma. En el caso de la firma digital, nunca se realiza en el ordenador, sino que éste envía un breve resumen del documento hasta el chip, donde se firma y vuelve a enviarse a la computadora, un sistema que impide que los datos salgan de la tarjeta.
No obstante, el director de asuntos jurídicos de la Asociación Española de Comercio Electrónico, Iñaki Uriarte, ha explicado las diferencias entre la identificación con DNI electrónico y la firma digital.
Esta última, expuso, supone un “otorgamiento de fe” a un documento de la Red, que aparecerá refrendado por la firma de quien lo suscribe, lo que le diferencia de la mera identificación como usuario que supone presentar el DNI electrónico.
En su opinión, para las transacciones de comercio electrónico, no será precisa la utilización de la firma digital, pues hasta ahora éste ha funcionado correctamente gracias a protocolos de seguridad como el SSL, que posibilitan al cliente “estar seguro de que la empresa es quien dice ser”.