El desafío VoIP
El avance de Internet como medio de comunicación amenaza los modelos de negocio existentes hasta ahora y los ingresos de las operadoras más conservadoras.
Las comunicaciones de texto y voz con ajustes instantáneos se sitúan en el punto de mira actual no sólo por lo que implican a nivel tecnológico con el simple uso de ordenadores habilitados, sino por lo que se avecina en el entramado empresarial.
Las búsquedas por Internet ya han pasado a la historia para facilitar el avance de los servicios de correos electrónicos, titulares personalizados y música a la carta, entre otras funcionalidades emergentes, de la mano de los grandes TI.
La expansión electrónica está a la orden del día con, ya lejos de lo que supone la actualización de la mensajería instantánea en cualquier lugar que pertenezca a este mundo, últimos servicios de llamadas telefónicas online.
Los cimientos de las telecomunicaciones se están modificando para satisfacción de millones de usuarios pero, cómo no, organizaciones que supuestamente velan por el desarrollo económico, se han llevado las manos a la cabeza.
El caso es que el argumento que se esgrima es más que cierto: los ingresos de línea fija de los operadores tradicionales se ven amenazados con el éxito de la telefonía VoIP y, más aún, el reto que se presenta a las compañías de móviles parece difícil de sortear.
Los modelos de negocio existentes hasta la fecha están tambaleando ante los avances de Internet y, de hecho, se espera a corto plazo una nueva normativa industrial.
Así pues, la pugna entre nuevos servicios de telecomunicaciones, políticas de tarifas y demás estrategias vinculadas a la maximización de las cifras corporativas, van a traer más que cola en este trimestre que empieza. Esperemos, como siempre, que el principal beneficiado de lo que se aproxima sea el mismo usuario que emplea tan a fondo tecnologías y telecomunicaciones.