El coche eléctrico más pequeño del mundo mide 4 nanómetros

El “coche”, por llamarlo de algún modo, tiene tracción a las 4 ruedas, ya que cada una funciona con su propio “motor eléctrico” recibiendo la electricidad del propio microscopio con el que se observa.

Necesita 500mV para cada media revolución de sus ruedas, causando el paso de los electrones un cambio estructural reversible que genera el movimiento hacia delante. con una velocidad de 0,6nm por estimulación eléctrica.

¿Y para qué sirve crear un coche eléctrico nanométrico? Pues en sí para nada, pero al menos gracias a su creación han mejorado su conocimiento en el diseño de maquinaria a escala nanométrica.

Ya lo que nos falta es que dentro de unos años empecemos a tener también atascos en nuestro torrente sanguíneo mientras los personajes de Érase una vez la Vida se vuelven locos por nuestras autopistas. [Nature]