El CEO de Waze revela que Google se gastó 1.150 millones de dólares en la start-up israelí
Bardin da a entender que el acuerdo fue acelerado por presiones de sus inversores lo que facilitó la venta de la start-up al gigante tecnológico.
Era una secreto a voces y finalmente se ha confirmado. Google compró la start-up israelí Waze el año pasado, la red social especializada en mapas de tráfico en tiempo real, para reforzar su servicio de Google Maps en un momento en el que sus rivales Apple y Facebook están apostando por sus propias aplicaciones de mapas. Sin embargo, lo que se desconocía hasta la fecha era la cantidad exacta desembolsada por el gigante tecnológico en la operación. Según revela la web TNW, la cantidad invertida por la compañía californiana habría rondado los 1.150 millones de dólares y sus responsables dan a entender que el acuerdo fue provocado por las “presiones” de sus inversores.
La adquisición, que fue ejecutada el pasado mes de junio por este valor que ha sido confirmado ahora por el CEO de la firma, Noam Bardin, en su cuenta de LinkedIn donde ha informado que el acuerdo se formalizó el año pasado, si bien sólo ha sido ahora cuando se ha hecho público el coste real de la operación. Bardin alude además a que una de las razones que les llevó a vender su compañía en junio de 2013 a Google fue la “presión” ejercida por parte sus inversores. “Si hubiéramos mantenido el control de la empresa, como lo han hecho Facebook o Microsoft, nuestra empresa sería ahora independiente”, señala el CEO. Los analistas por su parte consideran que la compra puede beneficiar a Google en tanto que Waze tiene un base de datos “muy buena” con “amplias posibilidades en tiempo real” porque puede actualizar sus contenidos que generan sus usuarios. “Pueden ofrecer información actualizad sobre accidentes de tráfico, cortes por obras o incidencias en las vías”, detalla Carolina Milanesi, analista de Gartner.
Desde el punto de vista de Waze esta adquisición podría verse como un movimiento estratégico porque puede ampliar su cuota de usuarios exponencialmente cuando antes apenas pasaba de los 28 millones de seguidores en todo el mundo, mientras que por el lado de Google la operación le serviría para mantener su hegemonía en la cartografía, donde ya es referente gracias a su servicio Maps.
Junto con estas posibilidades, la app permite añadir fotos para etiquetar los puntos problemáticos o indicar desvíos, y también podremos ver cuando nuestros amigos están conduciendo y si se dirigen al mismo destino que nosotros o a otro. Todo ello convierte a la adquisición de Google en una plataforma muy versàtil, según los analistas.