Imagen: Shutterstock (autor: Kostenko Maxim)
Mucho se ha hablado durante los últimos días del espionaje a la canciller alemana, Angela Merkel, y mucho se ha escrito durante los últimos meses del caso PRISM.
El programa de vigilancia de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA por sus siglas en inglés) fue destapado gracias a una serie de documentos que filtró el ex-analista de la CIA, Edward Snowden.
Desde entonces se ha denunciado, por ejemplo, la existencia de grupos de expertos para hackear smartphones de diversos fabricantes con sistema operativo Android, iOS o BlackBerry. Y ahora desde el periódico El Mundo informan de que la intervención telefónica salpica también a España.
Al parecer, tan sólo en un mes, la agencia americana habría sido capaz de interceptar más de 60 millones de llamadas en nuestro país, así como emails e interacciones en redes sociales.
Aunque la información recabada a partir de las llamadas no se referiría al propio contenido de las conversaciones. Se trataría más bien de metadatos o datos que definen a otros datos, esto es, el número del terminal, número de la SIM, posición geográfica y prolongación total de la llamada.
Esto ocurrió entre diciembre de 2012 y enero de 2013, aunque se desconoce si había sucedido antes o se prolongó durante más tiempo.
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