El BYOD ya es una realidad: 7 de cada 10 empresas permiten a sus empleados usar dispositivos personales
Pero todavía se mantienen vivas preocupaciones a nivel de seguridad, como posibles fugas de datos, accesos no autorizados a los sistemas e infecciones por ‘malware’.
El teletrabajo, cada vez más implantado, sobre todo a raíz de los confinamientos para frenar la expansión de la pandemia de coronavirus, va asociado en muchas ocasiones al uso de dispositivos personales y las estrategias BYOD de las empresas.
En estos momentos prácticamente 7 de cada 10 compañías permitirían a sus empleados usar dispositivos personales para llevar a cabo sus tareas. Algunas también lo autorizan para contratistas, socios, clientes y proveedores.
Pero esta expansión de los dispositivos personales en el ámbito laboral, constatada por Bitglass en su Informe sobre BYOD 2020, no llega libre de peligros. Un 63 % de los profesionales de TI se muestra preocupado por posibles fugas de datos. Y a un 53 % y un 52 %, respectivamente, también les inquietan los accesos no autorizados a datos y sistemas y las infecciones por malware.
Esta preocupación no va acompañada de medidas de seguridad férreas. Algo más de la mitad de las compañías (51 %) no dispone de visibilidad en las aplicaciones de intercambio de archivos. Además, un 30 % carece tanto de visibilidad como de control sobre las apps de mensajería para empresas. Y solamente un 9 % tiene soluciones antimalware en la nube.
Cabe añadir que las organizaciones necesitan tener acceso físico a los dispositivos, e incluso conocer su número pin, para protegerlos. Sobre esto Bitglass señala que podría ser aceptable para terminales de su propiedad, pero constituiría una intromisión flagrante en la privacidad para equipos comprados por sus empleados.
“Las dos principales razones por las que las empresas dudan a la hora de permitir el BYOD están relacionadas con la seguridad de la compañía y la privacidad de los empleados. Sin embargo, la realidad es que el entorno de trabajo actual requiere la flexibilidad y el acceso remoto que permite el uso de dispositivos personales”, observa Anurag Kahol, director técnico de Bitglass.
“Para resolver esta contradicción, las compañías necesitan plataformas integrales de seguridad en la nube que estén diseñadas para proteger cualquier interacción entre los usuarios, dispositivos, aplicaciones o ubicaciones web”, aconseja.