Estos datos corresponden al último estudio sobre hábitos, tendencias y tecnología presentado por Intel Security, que también subraya que los dispositivos personales que los españoles llevan normalmente a su oficina son su smartphone (74%, por encima de la media situada en el 61%), su portátil (26%) y su tablet (28%).
La integración natural del BYOD (Bring Your Own Device) en las empresas, sumado al Internet de las Cosas (IoT), fomentan, de acuerdo con Intel Security, el trabajo colaborativo y aumentan el rendimiento de los empleados. De hecho, el 56% de los españoles encuestados afirma que cuantos más dispositivos conectados tengan a su alcance, más sencillo es el desempeño de su trabajo. Esto incluye también a los wearables, que se irá introduciendo cada vez con mayor normalidad en el trabajo, como así lo cree el 69% de los españoles encuestados.
Lo paradójico del caso es que el 75% de estos profesionales también reconoce la práctica contraria: utiliza los equipos y dispositivos corporativos para uso personal. En concreto, el 70% para leer y escribir correos personales, el 41% para banca online y el 30% para realizar compras online.
Con este panorama, uno de los retos de la industria ha sido unificar todos estos dispositivos personales con el endpoint y las redes corporativas, para proteger las empresas de pérdidas de datos. En este sentido, los profesionales españoles encuestados se sienten muy seguros, con el 80% afirmando que sus respectivas empresas están protegiendo sus datos y su identidad de manera correcta. Un dato muy por encima de la media, que se sitúa en el 66%.
Junto a los datos del informe, Intel Security ha apuntado en un comunicado los cinco puntos sobre BYOD que toda empresa debería conocer. Son estos:
1. Según Gartner, en 2017, las empresas exigirán a sus empleados que sean ellos quienes adquieran sus propios dispositivos con fines laborales.
2. El BYOD puede ser una verdadera pesadilla para los departamentos de TI, que pueden considerarlo como una fuente potencial de caos, desorden, pérdida de datos y riesgo para la seguridad.
3. Si bien es cierto que los usuarios cuentan con un gran número de aplicaciones en sus dispositivos móviles, no todas cuentan con una robusta seguridad, por lo que pueden convertirse en un punto de entrada de malware y de robo de datos.
4. Al alojar documentos cuentas en la nube, renviar emails internos a webmail, o utilizar smartphones y tabletas con redes WiFi públicas no protegidas, los usuarios pueden poner en riegos sus datos.
5. Es importante controlar la forma en la que los empleados almacenan y comparten valiosa información corporativa en sus dispositivos móviles, y protegerla en caso de robo o pérdida de los equipos. Lo más idóneo es que la protección del endpoint descanse sobre una suite que integre diversas herramientas y cuya gestión esté unificada.
En los próximos años asistiremos al ‘boom’ de las monedas digitales de bancos centrales. En…
La popularidad de la tecnología de inteligencia artificial se dejará notar el año que viene…
La mayoría de las compañías de nuestro país ha sido blanco de los cibercriminales en…
Experimentó una mejoría del 20 % en comparación con los seis primeros meses del ejercicio…
La compañía espera incrementar sus ingresos entre un 3 % y un 5 % en…
Este proyecto complementario a la oferta de ventas flash ya existe en Francia y Bélgica…