El ascenso imparable de la nube
Los ingresos generados en concepto de infraestructura cloud durante el Q3 de 2014 han llegado a los 6.500 millones de dólares, según IDC. Es decir, son un 16% más altos que hace un año,
Puede que hablar de cloud computing ya no sea una novedad. Que las compañías vayan abriéndose paso entre nubes y adoptando sus ventajas para hacer que sus negocios avancen, por iniciativa propia o por respuesta a la competencia. Pero eso no quiere decir que debamos ignorar el fenómeno cloud.
De hecho, los datos que maneja IDC ponen de relieve su ascenso continuado. En concreto, durante el tercer trimestre de 2014 esta consultora ha detectado que prácticamente la tercera parte del gasto en “infraestructuras de servidores, almacenamiento en disco y switch de Ethernet” lleva la etiqueta del cloud computing.
Esto sería así porque “las nubes públicas y privadas representan las ‘fábricas de computación’ y los ‘depósitos de contenido digital’ de la era de la tercera plataforma”, en palabras de Richard Villars, vicepresidente de investigación sobre Datacenter y Cloud en IDC.
“Ya sea propiedad interna o ‘alquilados’ de un proveedor de servicios, los entornos cloud son activos estratégicos en los que organizaciones de todo tipo deben confiar para introducir rápidamente nuevos servicios con escala, velocidad y alcance sin precedentes”, añade Villars.
Respecto a los números de hace un año, los ingresos por infraestructura cloud han crecido un 16%. Se sitúan ahora mismo en los 6.500 millones de dólares.
Os recordamos que IDC prevé que una tendencia que también está al alza, el Internet de las Cosas, estreche lazos con los fenómenos de las ciudades inteligentes, la wearable technology y, por supuesto, el cloud computing, favoreciendo su desarrollo.
También ha adelantado números y habla de que, en 2015, se producirá un gasto de servicios cloud por valor de 118.000 millones. Aquí habrá que estar pendiente de la evolución de las soluciones IaaS, PaaS y SaaS y de posibles alianzas entre compañías de primer nivel.