El anteproyecto de firma electrónica se mantiene a la espera
La seguridad de las transacciones electrónicas puede dar un nuevo paso si el Consejo de Ministros aprueba el anteproyecto de firma electrónica, que pasaría al Parlamento con dos meses de retraso.
La aprobación del anteproyecto de firma digital es una de las órdenes del día que acometerá mañana el Consejo de Ministros en su reunión semanal, como paso previo para llegar al Parlamento, con un retraso de dos meses después de la fecha anunciada por Josep Piqué, ministro de Ciencia y Tecnología, quien, por su parte, expresó el pasado lunes su confianza en que reciba el visto bueno.
La nueva norma incluye la decisión de que las personas jurídicas puedan ser titulares de una firma electrónica, algo ya permitido por la Agencia Tributaria. En este contexto, no hay que olvidar que la característica básica de la firma digital es que permite la encriptación de documentos enviados por Internet, en un intento por mejorar la seguridad y la confianza en las transacciones en la Red. Además, garantiza que el mensaje enviado no pueda ser intervenido ni modificado, así como la autenticidad del emisor.
Los primeros colectivos profesionales que han utilizado la firma digital han sido los notarios y los registradores, con las ventajas que supone formalizar documentos a distancia. Asimismo, Piqué también ha adelantado que, en la intención de extender el uso de las Nuevas Tecnologías en las empresas, el Ministerio de Hacienda está ultimando un nuevo reglamento que permita la emisión electrónica de facturas.