“El año que viene, el papel del proveedor será especialmente crítico para el rendimiento tecnológico y empresarial”

Sostener una perspectiva a largo plazo a la hora de seleccionar socios tecnológicos es la recomendación que lanza Zoho de cara al año 2025.

Esta compañía destaca la importancia de trazar una estrategia que trascienda las necesidades inmediatas para superar los diferentes desafíos a los que se enfrenta la industria.

El riesgo tecnológico, en su opinión, adopta diversas formas. Por un lado están las brechas de seguridad, las interrupciones de servicio y las complicaciones normativas. A todo esto habría que sumarle el peligro de utilizar innovaciones como la inteligencia artificial sin conocimiento o el cambio constante de un mercado ultracompetitivo.

En este punto, Zoho sostiene que el papel de los proveedores resulta esencial. “Hoy en día, los proveedores no sólo son responsables de proporcionar acceso a las herramientas más recientes, sino también de garantizar que sean accesibles, se adapten a las necesidades de los clientes y estén alineadas estratégicamente con ellos”, señala Sridhar Iyengar, Managing Director de Zoho Europa.

“Las empresas que no consigan consolidar, limpiar y analizar los datos en toda su organización sufrirán un impacto negativo en su competitividad”, predice.

“Una mera combinación de uso de productos no ofrecerá una experiencia diferencial al cliente o al empleado, ni permitirá tomar decisiones basadas en datos y en tiempo real”, advierte. Así que “el año que viene, el papel del proveedor será especialmente crítico para el rendimiento tecnológico y empresarial”.

“Las empresas deben tener en cuenta a los proveedores que innovan continuamente, pero sin introducir subidas de precios significativas en el acceso a nuevas tecnologías”, aconseja Iyengar.

“Las ofertas orientadas a ofrecer valor añadido son fundamentales para garantizar que las empresas sigan siendo ágiles, flexibles y adaptables, aumentando su resiliencia ante cualquier riesgo”, prosigue. “No se trata sólo de vender un producto o una solución, sino de ayudar al cliente a alcanzar su potencial con garantías, flexibilidad y servicios de apoyo”.

“Y para completar esta implementación, es crucial una formación adecuada, tanto por parte del proveedor, como de las empresas que implementan un producto o solución digital específica. No sólo para el éxito de la adopción, sino también para el retorno de la inversión”, termina.