Las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) españolas han concluido un año repleto de retos y desafíos, enfrentándose a la caída del consumo interno, el aumento de la inflación y el incremento de los tipos de interés. A pesar de estas dificultades, un estudio de mercado titulado ‘Oportunidad en el cambio’, realizado por Acquis, revela que el 46% de las PYMEs en toda Europa se sienten optimistas sobre su futuro a largo plazo.
El pesimismo ha disminuido significativamente en comparación con el año 2021. Mientras que el 32% de las empresas expresaron sentirse muy pesimistas sobre su futuro en ese año, en 2023 este número ha descendido al 28%. Estos datos reflejan una transformación en el sentimiento empresarial, marcando una tendencia positiva para el tejido empresarial europeo.
Según el estudio ‘Tomando el pulso a las pymes’ realizado por BBVA, las mayores preocupaciones de las PYMEs en el último año incluyeron la inflación (47%), la rentabilidad de la empresa (38%), los costos energéticos (34%), el impago (26%) y la falta de demanda (26%). La supervivencia empresarial se ha convertido en un juego estratégico, donde la planificación y adaptación son clave.
Para hacer frente a estos retos, el estudio destaca la necesidad de mejorar las estrategias de marketing, establecer nuevas estrategias de negocio, comprender mejor las necesidades de los clientes y detectar oportunidades no exploradas. Luis Targhetta, Business Development Manager de Iberia para Acquis, señala: “No sobrevive el más fuerte, sino el que mejor se adapta al cambio”.
El informe ‘Oportunidad en el cambio’ de Acquis revela que, en 2023, las empresas encuestadas mostraron sentimientos más matizados en comparación con dos años antes. Aunque el 28% admitió sentirse preocupado, un 19% se mostró bastante pesimista y un 9% muy pesimista acerca de su viabilidad a largo plazo. Aquellas industrias mejor preparadas para adaptarse a las presiones económicas cambiante mostraron un mayor optimismo.
La persistente interrupción de las cadenas de suministro, la inflación, la crisis en Ucrania y los efectos persistentes de la pandemia de Covid-19 continuaron afectando las perspectivas económicas. El estudio de Acquis resalta las preocupaciones específicas de diferentes sectores, como el 25% de los encuestados en el sector agrícola preocupados por mantenerse al día con las innovaciones.
Un factor clave para superar estos desafíos es adoptar un enfoque optimista y analizar los obstáculos con la mejor actitud posible. “Mirar al futuro es clave para la supervivencia”, afirma Targhetta. La experiencia, la adaptación constante y la adopción de nuevas tecnologías se han vuelto imprescindibles para la competitividad y resiliencia empresarial en este panorama empresarial en constante cambio.
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