EEUU y Reino Unido restringen los dispositivos electrónicos en algunos vuelos
Los dispositivos “más grandes que un teléfono móvil” deberán ser almacenados en la bodega, en el caso de aviones procedentes de una decena de países.
La tendencia de los últimos años a relajar las normas de uso de dispositivos electrónicos en los aviones ha dado un paso atrás con la decisión de las autoridades estadounidenses y británicas. Transportar en la cabina dispositivos más grandes que un teléfono móvil estará prohibido en los vuelos procedentes de una decena de países.
Según informa TechCrunch, fueron las autoridades estadounidenses las primeras en avisar ayer a varias aerolíneas de Oriente Medio y África de que en breve sus pasajeros tendrán que abstenerse de embarcar con dispositivos electrónicos en los vuelos con destino EEUU. Estos aparatos deberán ser almacenados y controlados en la bodega del avión.
Como consecuencia, los pasajeros en estos vuelos tendrán que incluir sus ordenadores portátiles, tablets, ebooks y videoconsolas portátiles en su equipaje facturado. Funcionarios estadounidenses confirmaron esta prohibición, que afecta a 10 aeropuertos de ocho países, mayoritariamente musulmanes: Jordania, Egipto, Turquía, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Marruecos, Kuwait y Qatar.
La explicación de los funcionarios estadounidenses a la prohibición no se basa en una respuesta a una amenaza específica, sino a una “evaluación de inteligencia” que apunta que los terroristas están “buscando agresivamente” maneras innovadoras de llevar a cabo ataques.
Pocas horas después de anunciarse esta restricción, el diario inglés The Telegraph informaba de que Reino Unido se dispone a imitar la medida de EEUU. La prohibición británica se aplicará también únicamente a los aviones que vuelan al país, aunque algunos detalles difieren de la medida adoptada por el Departamento de Seguridad Nacional estadounidense.
Concretamente, las agencias de seguridad británicas han estado formulando planes para la prohibición de los dispositivos electrónicos que sean “más grandes que un teléfono móvil o inteligente de tamaño normal”, es decir, mayores de 16 centímetros de largo, 9,3 de ancho y 1,5 de grosor.
Estos dispositivos tendrán que ser colocados en la bodega en los vuelos que procedan de Egipto, Túnez, Jordania, Líbano, Arabia Saudi y Turquía, según anunció la primera ministra, Theresa May. Las aerolíneas que no cumplan con estos nuevos requisitos no podrán volar al Reino Unido.