Disponibilidad permanente de las aplicaciones gracias a la virtualización
Las ventajas de la virtualización son innegables. Hay enormes eficiencias operacionales que han de ser tenidas en cuenta en diferentes áreas, como es el caso de la disponibilidad 24/7 de las aplicaciones.
Ofrecer alta disponibilidad y la recuperación ante desastres para cumplir con las actuales demandas de funcionamiento 24/7, supone comprender todos los puntos de riesgo y la arquitectura que los rodea. La virtualización no ofrece la continuidad del negocio de forma gratuita, pero diseñar tu entorno virtual con las herramientas correctas y un poco de experiencia, puede facilitar en gran medida el proceso e incrementar tus oportunidades de tener éxito a un coste razonable para el negocio.
Como una de las tecnologías más disruptivas de los últimos tiempos, la virtualización esta liderando los cambios en los pequeños y grandes mercados de TI. Sin embargo, ¿llegarán los cambios lo suficientemente lejos? Desde que las empresas dependen de las TI, ha habido una sensación inconsciente de temor ante posibles fallos en los componentes de los sistemas, y en las nuevas formas de trabajar.
De acuerdo, la mayor preocupación ha sido la perdida de datos vitales para el negocio, lo que ha tenido como resultado una enorme evolución hacia los sofisticados sistemas actuales de recuperación de datos. La virtualización puede añadir un tremendo valor a la hora de garantizar la continuidad de negocio, pero no por sí misma. Es fundamental buscar una acertada combinación de tecnologías físicas y virtuales que se ajusten a las necesidades de tu negocio.
Los portavoces de la industria hablan mucho acerca de centrarse en la recuperación. “Gestión de la recuperación” o “recuperabilidad” son términos en boga, pero hacen un menor énfasis e ignoran un factor clave: una recuperación es la reacción ante un fallo. Para el momento en que la recuperación se ha completado, el daño ya esta hecho. La productividad ha caído, las comunicaciones se han interrumpido, y el negocio ha sufrido pérdidas. No importa la manera en que lo mires, en el mundo de los negocios para ser competitivo día a día, los sistemas críticos deben de estar permanentemente disponibles. Eso significa dar servicio a los clientes, proveedores y empleados 24/7, sin importar el lugar del mundo en el que se encuentren.
Construir una estrategia de TI que ofrezca una continua disponibilidad de los sistemas críticos del negocio debería ir más lejos que utilizar los clásicos sistemas de copia de seguridad, y los habituales principios de protección de datos. Juntar la virtualización, la automatización, la monitorización de aplicaciones y las tecnologías de replicación para asegurar la continuidad de negocio, acelera el valor de la virtualización más allá del cuarto de servidores.
Las causas reales de inactividad
Reconozcámoslo: a pesar de que las perspectivas de un desastre real existen, en la actualidad, un fallo en las instalaciones, un problema de software o un fallo de la propia TI es más probable que sea la causa de un desastre en el negocio, que inundaciones, huracanes, terremotos o ataques terroristas.
Toma como ejemplo las bases de datos. Un día sin bases de datos causado por el fallo de una unidad de refrigeración del cuarto de servidores, puede ser un desastre para una compañía en términos de beneficios, productividad y reputación. En otro nivel, un fallo de aplicación generado por un parche no aplicado a tiempo, por ejemplo, es mucho más probable que amenace a la disponibilidad de un servidor físico, que un fallo de suministro eléctrico propiamente dicho. Dondequiera que una aplicación crítica de negocio es implementada, el riesgo de caídas de los sistemas vienen desde múltiples vertientes. Desarrollar las infraestructuras adecuadas para prepararse ante esas amenazas suponen la diferencia última entre el éxito y el fracaso.