La discriminación de género en Silicon Valley va a juicio
Vuelve a aflorar un caso de sexismo en medio del debate de la falta de presencia equilibrada de mujeres en la industria TIC.
Un caso de discriminación de género ha provocado un amplio debate sobre el sexismo que persiste en Silicon Valley.
La directiva Ellen Pao, exsocia de la firma de inversión Kleiner Perkins Caufield & Byers (detrás de la financiación de compañías de alta tecnología como Google o Amazon) ha demandado a la empresa por condiciones inferiores a las de sus colegas.
Kleiner ha negado las acusaciones de discriminación pero ambas partes se sentarán a declarar ante el Tribunal Superior de San Francisco, como recoge Reuters.
En los últimos meses grandes empresas de tecnología han publicado estadísticas nada halagüeñas sobre el porcentaje femenino de sus empleados (en torno al 30%) y los escasos puestos directivos que detentan.
La mayoría de las empresas echa la culpa a la escasez de mujeres cualificadas para contratar, pero muchos críticos dicen que las organizaciones no están haciendo lo suficiente para atraer y retener a las mujeres.
Lo cierto es que la industria TIC sigue sin contar con una presencia equilibrada de mujeres y los salarios de estas son de media un 9% inferiores a los de los hombres.
En este contexto, compañías como Intel han propuesto avanzar en materia de diversidad en Silicon Valley con un plan de inversión de 300 millones de dólares para ayudar a más mujeres y minorías étnicas a estudiar ingeniería y ciencias informáticas, y equilibrar la situación de aquí a 2020.