El año pasado Deutsche Telekom trató de vender T-Mobile EE.UU a Sprint, pero la operación se vino abajo por la oposición regulatoria, como ya sucedió en 2011 con la oferta de compra por parte de AT&T.
La fusión entre Sprint y T-Mobile habría creado el tercer mayor operador de EEUU junto a AT&T y Verizon.
Ahora, en la reunión anual con los accionistas Tim Hoettges, CEO de Deutsche Telekom, propietaria del 66% de T-Mobile, ha anunciado que las cuentas de la compañía están mucho mejor que hace dos años.
Cabe recordar que en 2012 el operador alemán registró los segundos peores resultados de la historia a causa de su filial estadounidense.
“Nuestro deber es seguir mejorando el retorno de T-Mobile EEUU y para ello consideramos un socio que nos ayude a hacerlo”, ha manifestado Hoettges, tal y como recoge Reuters.
Deutsche Telkom considerará cualquier socio que puede mejorar la rentabilidad de sus operaciones en EEUU y este será su reto.
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