Desarrollan una batería elástica que, además, se recarga de forma inalámbrica
Esta innovadora batería de iones de litio tiene una autonomía de hasta 9 horas y sigue funcionando incluso cuando alcanza el 300% de su tamaño original.
El equipo formado por los científicos Yonggang Huang, de la Universidad de Northwestern, y John A. Rogers, de la Universidad de Illinois, ha conseguido desarrollar una batería de iones de litio capaz de suministrar energía pese a sus innovadoras capacidades elásticas.
Y es que este producto sigue funcionando, alimentando un diodo LED comercial, incluso cuando se encuentra completamente “estirado, doblado, torcido y montado sobre un codo humano”.
Su potencia y voltaje son similares a la de una batería de iones de litio convencional del mismo tamaño, con la diferencia de que ésta se estira hasta alcanzar un tamaño que equivale al 300% de sus dimensiones originales, regresando sin problemas a su estado natural, y que puede recargarse hasta 20 veces con muy poca pérdida de capacidad.
Según la investigación, funciona de ocho a nueve horas sin necesidad de cargarse, algo que puede hacer de forma inalámbrica.
“Empezamos con un montón de componentes de batería, puestos unos al lado de los otros en un espacio muy pequeño, y los conectamos todos con largas línas onduladas muy apretadas”, explica Huang. “Estos cables [en forma de S] proporcionan la flexibilidad. Al estirar la batería, la interconexión de líneas onduladas se despliega de forma parecida al desbobinado de un hilo”.
Lo bueno es que “podemos estirar el dispositivo mucho y aún así tener una batería que no deja de funcionar”, añade.
Al prescindir de cables para conectarse a una toma de corriente eléctrica, los dispositivos electrónicos estirables podrían emplearse en cualquier lugar, inclusive en el interior del cuerpo humano como implantes para controlar las ondas cerebrales o la actividad cardiaca.
A continuación, el vídeo de la proeza: