Dell prohibe la exportación de residuos electrónicos a países en desarrollo
La compañía ha adoptado una nueva política para gestionar responsablemente la basura tecnológica.
Dell ha renovado su política de gestión responsable de residuos y ha prohibido la exportación de basura tecnológica a países en vías de desarrollo, práctica común entre algunos fabricantes del sector TIC.
El Convenio de Basilea ya exige a las compañías que no exporten algunos residuos, dependiendo de su composición química o de los materiales que estén compuestos, sin embargo, Dell ha extendido la definición de residuo no exportable a todos aquellos materiales que ya no se utilicen, sea cual sea su composición.
La compañía asegura que exigirá que todos los equipos que se lleven a países en vías de desarrollo sean probados y se certifique que están operativos antes de su traslado. Con esto la compañía lo que pretende es evitar que países del tercer mundo se llenen de “chatarra tecnológica” inservible.
A largo plazo, Dell se ha comprometido a tratar responsablemente la basura electrónica delicada. Además, la compañía ha destacado quel no permite que los residuos electrónicos se exporten desde países desarrollados a países no desarrollados (no miembros de la OCDE o de la UE), ni directamente, ni a través de intermediarios.
Por último, Dell asegura que pondrá especial énfasis en evitar el trabajo infantil o penitenciario en la eliminación de residuos electrónicos.