DE-CIX supera su propio récord de tráfico al alcanzar los 10 Tbps
En ello tienen que ver fenómenos como la crisis del coronavirus o la expectación generada por las elecciones de los Estados Unidos.
El operador alemán de puntos de intercambio de internet DE-CIX sigue batiendo récords. Si a principios de marzo, con la explosión de la pandemia de coronavirus, la transferencia de datos en DE-CIX Frankfurt alcanzaba los 9 Terabits por segundo (Tbps), ahora ha superado la barrera de los 10 Tbps.
Se trata de un récord mundial, registrado durante la tarde del 3 de noviembre. Hace un año por estas fechas, la cifra era de 7,1 Tbps, lo que significa que el tráfico de datos en DE-CIX Frankfurt se ha disparado un 40 %. En circunstancias normales, el incremento sería del 10 %.
Otras ubicaciones de DE-CIX como Nueva York, Dubái, Estambul, Marsella o Madrid también registran sus propios hitos de tráfico en horas punta. En marzo, DE-CIX Madrid obtuvo 468,39 Gigabits por segundo (Gbit/s) y ahora su máximo está en los 520 Gbit/s.
“Ya sea por la educación y formación online, el teletrabajo o para el ocio, la pandemia mundial del virus COVID-19 ha dado lugar a un meteórico aumento en el uso de aplicaciones digitales”, contextualiza Thomas King, CTO de DE-CIX, “como el streaming o los juegos online. Además, este año tampoco ha habido una disminución de tráfico en los meses de verano, sino todo lo contrario”.
“Como consecuencia del coronavirus, la digitalización ha experimentado un impulso a todos los niveles. En concreto”, señala, “observamos que las grandes empresas y las sociedades que cotizan en bolsa están adaptando actualmente sus estrategias de interconexión y están investigando la posibilidad de intercambiar datos a través de los puntos de intercambios de internet”.
“Con todos los ojos puestos en las elecciones de los Estados Unidos esta semana, se ha detectado un impacto adicional en el tráfico en todo el mundo”, añade King. “Toda esta situación ha dejado claro que internet puede soportar grandes volúmenes de demanda, como las que supone un confinamiento global. Ahora es el momento de aumentar la calidad de internet al máximo, que beneficie al usuario final”.