Cuestiones de privacidad podrían frenar la expansión de Google Glass
Existe la amenaza de protestas públicas y prohibiciones legislativas para el uso del nuevo producto en determinados espacios.
La llegada de las gafas de realidad aumentada de Google todavía no se ha hecho efectiva y ya ha suscitado polémica en materias críticas como la privacidad y los derechos de autor.
Sin duda, Google Glass es un producto innovador que despertará un gran interés entre los usuarios por la posibilidad de prestaciones que hasta ahora no se han visto en un dispositivo móvil.
Sin embargo, la capacidad para hacer fotos, grabar video y audio indiscriminadamente en espacios públicos ha empezado a levantar reacciones en la industria.
La primera en llegar ha sido la de un bar de Seattle (EE.UU.) que, tal y como publica ZDNet, ha anunciado expresamente que no permitirá el uso de las gafas de Google en su establecimiento.
El propietario ha manifestado que no quiere que sus clientes sientan amenazada su privacidad por este producto.
Podría llegar una oleada de actitudes similares y, con ello, un refuerzo de prohibiciones legislativas para el uso de Google Glass en determinados espacios. Entornos como las escuelas públicas, parques infantiles, aeropuertos, etc. pueden ser susceptibles de las protestas.
Por otro lado, las empresas también evaluarán su grado de exposición y responsabilidad en materia de seguridad en las zonas de trabajo.
No obstante, Google Glass se caracteriza por la variedad de usos y aplicaciones, muchas de ellas muy útiles para el ámbito empresarial como la traducción, grabación de eventos, comunicación, correo electrónico, redes sociales, búsqueda de lugares de reunión o la posibilidad de realizar videoconferencias.
El producto podría llegar al mercado en 2014 a un precio aproximado de 1.500 dólares.