Las descargas de música y películas protegidas con derechos de autor están aumentando no sólo a través de los ordenadores de los hogares, sino también mediante los equipos de las oficinas. Según reporta la firma de seguridad ScanSafe, en los últimos meses se habría dado un incremento del 55% en el número de personas que realizan descargas ilegales en su lugar de trabajo.
Este auge podría deberse, en parte, a que algunos empleados desconocen las políticas de sus empresas, pero principalmente responde a que estas acciones les sumergen en una especie de “trance” que les hace del olvidarse del entorno en el que se encuentran, según la compañía.
“Los empleados asumen equívocamente que pueden usar Internet en el trabajo de la misma forma en que lo utilizan en casa y esta es una de las razones de este aumento constante de intentos de descargas ilegales en los últimos meses”, señala Spencer Parker, director de producto de ScanSafe. “Estas actividades suponen un doble golpe para las compañías, ya que, además de poder meterlas en problemas jurídicos, las están poniendo en un riesgo claro de ser infectadas con malware”.
Desde ScanSafe recomiendan a las organizaciones crear políticas de uso aceptable y difundirlas entre sus trabajadores para concienciarles de que se trata de una falta, además de implantar tecnologías para evitar que sucedan.
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