Leopard tiene un gran número de opciones y funcionalidades que pasan desapercibidas para la mayoría. Por ejemplo, es posible crear iconos propios para cualquier carpeta de nuestro equipo para personalizarlo al máximo.
Lo primero es seleccionar la imagen que queremos que aparezca en el icono. A partir de ahí tenemos dos opciones:
Podemos usar directamente esa imagen. Accedemos a la carpeta que queremos modificar y abrimos la información de carpeta (Cmd+ I o Ctrl+clic y escogemos Obtener información). Ahora sólo hay que arrastrar la imagen directamente al cuadrado superior izquierdo donde está el icono antiguo y se convertirá automáticamente en el icono nuevo.
También podemos hacer una captura de pantalla de cualquier imagen que tengamos en el ordenador o que esté en Internet, seleccionando la parte que queremos y dejando que se quede en el portapapeles. Para ello pulsamos Cmd+Ctrl+MAY+4 y seleccionamos el área de la imagen que nos interesa. Una vez que hemos accedido al cuadro con la información, directamente sobre el icono de la carpeta, pegamos del portapapeles la selección que hemos hecho.
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