Cooper y Tomlinson recogen el Príncipe de Asturias
Los antepenúltimos en subir al escenario del Teatro Campoamor y los antepenúltimos en recibir su premio, Martin Cooper (en la imagen de portada) y Samuel Raymond Tomlinson (más abajo) acaban de recibir en Oviedo el premio príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica.
Emocionados, los dos premiados se levantaron cuando les tocó su turno y se acercaron a recoger su diploma acreditativo. El primero en acercase al príncipe de Asturias fue Cooper, que se mostraba muy ilusionado y expansivo. Ambos agradecieron a los asistentes con grandes gestos de alegría el galardón.
El jurado, como apuntó durante la entrega del premio correspondiente, ha valorado la aportación de los inventos de ambos científicos para crear “formas de comunicación que dan lugar a un mundo conectado, sin fronteras”. Cooper es el padre de la telefonía móvil y a quien se deben muchos de los avances que hoy permiten la comunicación tal y como se conoce. Tomlinson es quien convirtió la arroba en lo que hoy es, más allá de la medida de peso que era en el pasado.
Tomlinson comentaba humorísticamente ante los medios de comunicación en la rueda de prensa en la que analizaba el galardón que él sí es el padre del correo electrónico, pero no el de los envíos basura, el spam, el otro lado del correo electrónico.
Tanto Tomlinson como Cooper se han alzado con el galardón ya que, como ha expresado el jurado, “porque sus hallazgos han revolucionado la manera de comunicarse de miles de millones de ciudadanos” y porque a día de hoy ayudan a conseguir los llamados Objetivos del Milenio y suponen una vía de desarrollo para los países del Tercer Mundo.
El príncipe de Asturias reafirmó durante el discurso de cierre esta vertiente de los inventos de Cooper y Tomlinson, asegurando que permiten concectarse a todos los ciudadanos a escala global.
Además, aseguró, los hallazgos de estos dos científicos son el fruto de una intensa carrera. Martín Cooper ya había conseguido enormes avances en comunicaciones en 1954, recordó Felipe de Borbón, realizando dos décadas después la primera llamada desde un teléfono móvil.
Los dos premiados recogen el testigo TI de Google, que se alzó el año pasado con el premio de Comunicación y Humanidades, y en el campo científico a los Sumio Iijima, Shuji Nakamura, Robert Langer, George M. Whitesides y Tobin Marks, creadores de nuevos materiales.
En total, en la presente edición se han presentado 240 candidaturas, entre las que se encontraba la del fundador de Apple, Steve Jobs, provenientes de 55 países. Como aseguraba al inicio de la entrega de premios el presidente de la Fundación Premio Príncipe de Asturias, Matías Rodríguez Inciarte, los galardones intentan destacar los avances para conseguir un mundo mejor.
“Pensamos como el poeta que el porvenir es un lugar demasiado cómodo para poner los sueños”, apuntaba. Premios como el otorgado a Tomlinson y Cooper o al escritor Ismaíl Kadaré, que recordó como en la Albania comunista que era su país lo único que podía entrar desde España era El Quijote.
Fotografías oficiales de la Fundación Príncipe de Asturias