La importancia de contar con mentores a la hora de emprender
Desde SmashForward insisten en lo útil que puede resultar recibir opiniones externas de figuras experimentadas que no tienen vinculación emocional con el proyecto.
La creciente popularidad de las startups ha atraído a muchos jóvenes que quieren emprender y ven esta alternativa como una oportunidad de futuro. Sin embargo, el proceso de creación de una startup puede verse como abrumador para un emprendedor sin experiencia previa. Muchos fundadores primerizos se preguntan: ¿por dónde empiezo?
Matias Bonet, CEO de consultora tecnológica Smashforward y CTO de la empresa desarrolladora de API lemon.markets, asegura que “siempre habrá una oportunidad de trabajar en una corporación, pero ahora es el momento de innovar y romper moldes”.
Además, el responsable destaca la importancia de un mentor en el proceso, ya que según el estudio realizado por EY Entrepreneurs Access Network (EAN) las probabilidades de mantener un negocio durante más de cinco años son del 70% y en España, de acuerdo con el ‘Mapa del Emprendimiento’ de South Summit, la edad media de las startups alcanza los 2,7 años.
Para Bonet, el primer paso para fundar una startup es “probar por qué tú idea es válida, por qué es diferente. La gran mayoría de los fracasos que tienen lugar dentro del primer año de las startups se podrían haber previsto: no contaban con los clientes suficientes, el producto/servicio no cumplía las necesidades, el mercado no estaba suficientemente desarrollado, etc.”
Es por esta razón, que hay que desmontar la idea, imaginarse todos los escenarios posibles y entonces, si la hipótesis pasa todas las pruebas, es el momento de desarrollarla. En ese sentido, contar con opiniones externas, como la de un mentor, que no tenga vinculación emocional con el emprendedor ni el proyecto, ayuda a evaluar de una manera objetiva y eficaz su viabilidad.
Un buen momento para emprender
Matías Bonet considera que“ es el momento idóneo para lanzarse a emprender. Contamos con infinidad de recursos como incubadoras, aceleradoras, redes de financiación, etc. que pueden garantizar el éxito de un proyecto”.
El ecosistema español de startups se encuentra en un momento de madurez. Según los datos del último informe de South Summit, España alberga 11.100 empresas emergentes, que emplean a 140.000 personas, siendo el cuarto país europeo en número de startups. Además cuenta con 6.446 inversores privados, 366 grupos de inversión, 149 aceleradoras y 99 incubadoras.
El 40% de los inversores nacionales se concentraría en Madrid y en la comunidad recaen el 60% del total de la financiación. Así, superaría a Barcelona por primera vez. Con un ecosistema formado por 3.000 startups y 40.000 empleados, el hub de Madrid es de los más importantes en Europa.