Aún no está completamente desplegada y adoptada la quinta generación de comunicaciones móviles, pero los reguladores y los principales fabricantes de la industria de las Telecomunicaciones ya están trabajando en la futura 6G.
Se trata de un proceso que durará años, pero ya conocemos algunas de las características que ofrecerá, como las que nos adelanta en esta entrevista Dario Sabella, Senior Manager Standards and Research de Intel.
Sabella se centra en el enfoque de Intel hacia la tecnología 6G teniendo en cuenta que los sistemas del futuro tendrán que soportar KPIs más nuevos y más estrictos, servicios diferenciados, redes más grandes, complejas y ágiles y mayores grados de automatización. Y eso implicará que para dar respuesta a estos retos, la tecnología 6G tendrá que ir más allá del punto de vista tradicional centrado en las comunicaciones.
La capacidad de computación en la nube nativa y los algoritmos de inteligencia artificial tendrán especial relevancia y se tendrán muy en cuenta en el desarrollo de esta tecnología, tal y como nos explica el portavoz de Intel:
—¿Qué hoja de ruta tiene marcada la sexta generación de comunicaciones móviles?, ¿cuándo llegará a nivel comercial?
La hoja de ruta de la red 6G comenzó con proyectos de I+D y ahora estamos en la fase de iniciar la normalización. Mientras que está previsto que la versión 18 del estándar 3GPP esté terminada para el primer trimestre de 2024, actualmente el plan del 3GPP es definir las especificaciones de la Release 19 (o Rel.19 por sus siglas en inglés), así como las prioridades de los temas relacionados. Así, mientras que la Rel.19 proporcionará los requisitos 6G, y la Rel. 20 llevará a cabo estudios 6G, se puede considerar un conjunto de especificaciones 6G consolidadas para la Rel.21, que estaría finalizado en 2028.
Esto significa que existe consenso generalizado para que la comercialización de la red 6G sea posible en 2030.
— ¿Cuáles serán las primeras características que veremos en las redes 6G en materia de tiempo de respuesta, capacidad y velocidad de transmisión de datos?, ¿qué mejoras veremos comparando 6G con 5G?
Puesto que el paquete Rel-19 se definirá en diciembre de 2023, es aún demasiado pronto para señalar cuáles serán las primeras características que veremos en las redes 6G, ya que la priorización de temas está aún por decidir.
Sin embargo, el requisito mínimo de rendimiento técnico para 5G incluye velocidades máximas de 20Gbps en el enlace descendente y 10Gbps en el enlace ascendente, con el usuario objetivo experimenta velocidades de datos de 100Mbps en el enlace descendente y 50Mbps en el enlace ascendente. Además, en algunos casos la latencia debe ser inferior a 1 ms, para permitir casos de uso extremadamente críticos. La UIT definirá entre 2024 y 2027 los requisitos y criterios de evaluación pertinentes de las posibles tecnologías de interfaz radioeléctrica para las IMT-2030 (también conocidas como “6G”). Se espera que los futuros sistemas ofrezcan tanto capacidades mejoradas, que estarán relacionadas con las métricas existentes, como la latencia y la velocidad de datos máxima, como que añadan nuevas capacidades, como las relacionadas con la detección, el posicionamiento y la IA. Otras métricas también son importantes para la 6G, como la fiabilidad y la disponibilidad, para responder a las necesidades de segmentos verticales del mercado.
Pero en realidad, aparte de las nuevas frecuencias y tecnologías de radio, me gustaría destacar que los nuevos servicios pueden ser soportados gracias a innovaciones clave también en el núcleo y en el edge, que conducirán a una arquitectura 6G nativa de la IA y nativa de la nube.
— ¿A qué retos nos enfrentamos para que el 6G pueda responder a las necesidades de las organizaciones y los usuarios finales?
Uno de los principales retos es el coste asociado al despliegue y al funcionamiento de las redes móviles. La competencia en este ámbito es feroz y los operadores se preguntan hasta qué punto será asequible y sostenible la evolución hacia los sistemas 6G. Asimismo, una exigencia para todos es la eficiencia energética, a todos los niveles, que repercute en el OPEX.
— ¿Qué importancia tendrá la sostenibilidad medioambiental y el consumo energético en su desarrollo?
Ésta es ya una gran preocupación de las partes interesadas, pues la factura energética de los operadores móviles ya es bastante elevada. El increíble crecimiento de la demanda de tráfico está incluso amplificando el problema, ya que la futura evolución de los sistemas debería tener en cuenta la sostenibilidad, como requisito clave de diseño.
No se trata de afirmar que la 6G pueda contribuir radicalmente a la sostenibilidad medioambiental en todos los sectores de la empresa (como, por ejemplo, la fabricación, que por naturaleza consume mucha energía), pero al menos hay ámbitos en los que las comunicaciones 6G pueden ayudar sustancialmente a ahorrar energía al respaldar servicios más eficientes desde el punto de vista energético.
— ¿Hasta qué punto la Inteligencia Artificial influirá en el desarrollo del 6G?, ¿qué integraciones 6G + IA tendrán más repercusión?
A día de hoy, la IA está omnipresente en las redes de comunicaciones actuales, por ejemplo para la optimización, el funcionamiento y el mantenimiento de las redes. En el futuro, este fenómeno se acentuará aún más, ya que están apareciendo muchas innovaciones impulsadas por la IA en los nuevos paradigmas de diseño de los futuros sistemas 6G. Desde la tecnología radioeléctrica hasta los motores de optimización y los agentes de IA que aplican predicciones de calidad del servicio, o algoritmos de IA/ML para la gestión de los recursos radioeléctricos con el fin de optimizar la cobertura y la capacidad de los sistemas, entre otros.
— ¿Qué papel va a jugar Intel en el desarrollo del 6G?, ¿cuál es vuestra visión y las claves por las que vais a apostar?
La visión de Intel se apoya en la convergencia futura entre los sistemas de comunicación y computación. El sistema nativo de la nube establece una base de plataforma para integrar los servicios de comunicación, computación y datos en una nube de área amplia 6G y soportar cargas de trabajo nativas de IA.
Por tanto, el sistema 6G irá más allá de los servicios de comunicación y ofrecerá la próxima generación de experiencia del mundo digital. En esta perspectiva, MEC (Multi-access Edge Computing) también se encuentra entre las tecnologías clave que apoyarán los sistemas 6G nativos de la nube, con la normalización pertinente en los campos de la federación y la fragmentación multidominio y multitenencia, la ciberseguridad en el edge y el apoyo al diseño nativo de edge para los desarrolladores de aplicaciones.
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