¿Su conexión WiFi es lenta? Apague el árbol de Navidad
Las luces de Navidad y otros electrodomésticos pueden hacer disminuir la velocidad de la conexión WiFi.
Quienes tengan la suerte de disponer de unos días de vacaciones en Navidad, es probable que aprovechen su tiempo libre para ver series o películas online, navegar por la red, realizar sus compras navideñas en comercios electrónicos, etc.
Sin embargo, se pueden encontrar con una desagradable sorpresa: su conexión WiFi está más ‘espesa’ de lo habitual, yendo más lenta o incluso perdiendo la cobertura en algunos puntos de su casa. Lo normal es que piensen que se trata de una sobrecarga en la red de su operador, pero la respuesta a este problema puede ser mucho más sencilla.
Según un estudio elaborado por Ofcom, el regulador del Reino Unido, las luces de Navidad pueden hacer disminuir la velocidad del WiFi. ¿Pero por qué sucede esto? Panda explica qué hay elementos interfieren en la señal. Los electrodomésticos son los grandes ‘enemigos’ de la conexión WiFi. Los hornos, congeladores, frigoríficos, lavadoras o lavavajillas son de metal y tienen tubos llenos de líquido, por lo que absorben la señal. Pero si hay un aparato que se lleve la palma, éste es el microondas. Se trata cajas de metal que funcionan con una potencia en torno a 2,4 GHz, la misma frecuencia que el WiFi, por lo que al encenderlos se genera un ‘agujero negro’ a su alrededor para estas señales inalámbricas.
Otros ‘depredadores’ de WiFi son los teléfonos inalámbricos, televisores y altavoces. Es muy frecuente que el router esté cerca de este tipo de aparatos, especialmente de los teléfonos, que trabajan en la misma frecuencia. Los televisores no son malos por sí solos, pero afectan al rendimiento del router si están cerca. Y lo mismo sucede en el caso de los altavoces, que básicamente son electroimanes, por lo que influyen en la señal si están cerca del router.
Además, hemos de tener en cuenta la presencia del router de nuestro vecino, ya que incidirá en nuestro WiFi si está cerca del nuestro. En las construcciones en altura se agrava el problema, ya que la señal está expuesta por todos los flancos. Si hay más interferencias, el router propio incrementa su difusión, provocando que el equipo del vecino haga lo mismo.
También incide negativamente la presencia de tuberías, ya que los conductos llenos de líquido absorben la señal, como decíamos previamente. Y los aislantes que tenga la casa también obstaculizan, ya que aislan la habitación de la acción de elementos externos, incluido el WiFi. Igualmente, las personas merman la calidad de la conexión, absorbiendo la señal.
¿Cómo solucionarlo? Como es poco probable que podamos o queramos convertir nuestro hogar en una ‘jaula de Faraday’, impenetrable a la conexión de telefonía móvil o FM, se pueden tomar algunas medidas para mejorar la calidad del WiFi. En primer lugar, Panda recomienda colocar el router en un punto medio de la casa, ya que difunde su señal en todas direcciones.
Es recomendable cambiar los cables. Un cable más corto y de mayor calidad ofrece una velocidad de conexión superior. Es preferible emplear cables Ethernet en lugar de cables telefónicos largos. Si la señal es muy precaria, convendría sustituir el router por uno nuevo, que puede aportar una notable mejora en la velocidad y calidad de la señal. Y otra posibilidad es cambiar el canal del WiFi, ya que con esta sencilla operación se podrían disminuir las interferencias de routers cercanos.