¿Cómo influye el rendimiento web en el ecommerce?
El tiempo de carga de nuestro ecommerce repercute directamente en las ventas. Cada segundo de mejora puede hacer que la tasa de conversión aumente hasta en un 10%.
Uno de los desafíos a los que se enfrenta el ecommerce es encontrar el justo equilibrio entre la oferta más completa de contenidos y la optimización de la web para no perjudicar a la experiencia de navegación del usuario.
Aprovechando estas fechas de ‘frenesí’ del comercio electrónico, con el ‘Cyber Monday’ en el horizonte, la compañía Radware ha presentado el estudio ‘Situación del mercado: Velocidad de página y rendimiento web en el comercio electrónico, otorño 2014’, donde analiza el rendimiento de los portales de comercio electrónico más populares.
Este estudio ofrece algunas conclusiones interesantes. En primer lugar, señala que la página mediana de los 100 sitios de ecommerce más populares requiere 6,5 segundos para cargar el contenido y que el usuario pueda interactuar, como se puede ver en esta infografía. Sin embargo, lo ideal sería que la carga llevase 3 segundos o menos. Sólo 12% de los distribuidores fueron capaces de mostrar el contenido en menos de 3 segundos. Además, para descargar el contenido completo se llegan a requerir 11,4 segundos. Un 22% de las tiendas necesitó 10 segundos o más para poder ser interactivo, mientras que un 2% precisó 20 segundos o más.
Como vemos, la respuesta no resulta nada ágil, por lo que puede disuadir al usuario. Además, la carga se ha ralentizado en el último año. Así, la página mediana ha aumentado el tiempo de carga en un 23% respecto a los resultados registrados hace doce meses. En 2013, la página mediana tardaba 5,3 segundos ser interactiva y 8,6 segundos en cargarse por completo.
El informe remarca que, aunque la diferencia sea de apenas 1,2 segundos, cada segundo cuenta. De este modo, señala que Walmart.com descubrió que las conversiones en venta aumentan un 2% por cada segundo de carga que mejoramos. En Staples.com, la cifra de conversiones aumenta hasta en un 10%.
¿Pero en dónde residen esos problemas en la carga? ¿Cuáles son las razones de esta ralentización? En primer lugar, en la carga útil. La página mediana de este año tiene un peso de 1492 KB, un 19% más que hace un año. Las páginas web cada vez van más cargadas de recursos (imágenes, CSS, JavaScript), por lo que crecimiento complica la carga y la ralentiza.
Según el estudio, el 10% de los ecommerces más populares incorporan más de 200 recursos. Cada uno de ellos aumenta el tiempo de carga y, además, incrementa el riesgo de fallos. Por ejemplo, si el CSS está mal ejecutado puede traer problemas de rendimiento, bien sea porque las hojas de estilo precisen excesivo tiempo de carga o porque los ficheros estén mal ubicados y bloqueen la carga del resto de contenidos.
Por otro lado, Radware lanzó hace poco un estudio que analizaba la influencia de la optimización de imágenes en el rendimiento de la web y su repercusión en la satisfacción del usuarios. Según el mismo, alrededor de 65% de los internautas se sienten frustrados si las imágenes tardan demasiado en cargar.