No todos los documentos que se comparten gracias a las virtudes de las plataformas de cloud computing para temas de almacenamiento y sincronización tienen el objetivo de acabar en manos de innumerables personas.
Hay veces en las que esa puesta en común se realiza a pequeña escala. Así que, para contribuir a mantener el material que se comparte lo más controlado posible, Google ha decidido introducir una nueva opción en su servicio en la nube Google Drive.
Se trata de Information Rights Management, una herramienta que está encaminada a desactivar la posibilidad de descarga, de impresión y de copiado de archivos que han sido compartidos con otras personas, ya sean estos documentos de texto, hojas de cálculo o incluso presentaciones.
Obviamente, la orden de desactivación sólo la puede dar la persona que ha creado tales archivos en primer lugar. Para ello debe seleccionar el menú de Avanzada que se esconde dentro del botón de Compartir y, desde ahí, pinchar en “No permitir descargar, imprimir o copiar elementos a lectores y personas que añaden comentarios”.
Otra limitación se refiere al soporte de esta opción, cuya habilitación funciona únicamente en la web. Aunque a partir del momento en el que ya se encuentre habilitada desplegará su magia sobre cualquier plataforma, según explica Google.
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