Cómo encontrar talento en tiempos de crisis
Los equipos de recursos humanos no sólo buscan empleados que destaquen por sus habilidades técnicas, sino que sean capaces de innovar, superarse y evolucionar.
Dicen que las buenas ideas surgen en tiempo de crisis y parece que hacia ese concepto de talento exquisito y extremo se está encaminando la gestión de recursos humanos en España. O al menos lo está intentando, ya que de momento los números todavía posicionan a nuestro país más allá del trigésimo puesto en el Índice Global de Competitividad del Talento.
¿Qué se puede hacer para revertir las tornas? ¿Qué están haciendo aquellos que reclutan empleados para encontrar grandes mentes entre los candidatos a un puesto de trabajo? ¿Hacia dónde se dirige el mercado laboral?
Las compañías tecnológicas estarían campeando el temporal mediante la construcción de plantillas que combinan la competencia profesional con todo lo que ello supone en cuestión de formación y habilidades adquiridas con el paso de los años, con algo más intangible como es la actitud ante los retos propuestos o la propia gestión emocional, la capacidad de innovación y también las ganas de evolucionar.
Esto permitiría aprovechar mejor los recursos de una oficina hasta configurar “plantillas mucho más reducidas, con más talento y más productividad”, según los expertos en el tema. Pero también ayudaría a valorar ciertas tendencias que rompen con la visión de un equipo tradicional, como puede ser el teletrabajo o la contratación de colaboradores freelance. Estos últimos ya suponen el 1,4% de la fuerza laboral española.
Otra corriente que se estaría detectando en la actualidad es el desarrollo de planes de educación y de retención del propio talento. Aquí entran cuestiones como enseñar a ser capaces de liderar en tiempos de cambio o de satisfacer las demandas de los usuarios y también las posibilidades que hay de engancharse a la movilidad interna.
Y es que quien consigue motivar a sus empleados para que se superen día a día, tiene mucho ganado. Las oportunidades comienzan por la propia configuración de una plantilla que se ve capaz de luchar por utopías.
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