Cómo elegir la mejor estrategia para migrar a IPv6
Nuestra Sociedad Digital, en la que cada uno puede conectarse a Internet desde cualquier lugar y momento, avanza a un ritmo cada vez más rápido, lo que requiere la implantación de esta generación más pronto que tarde.
La transición a IPv6 es una necesidad
Es necesario empezar a migrar a IPv6. Así que, ¿por qué aún no lo hacen las organizaciones? La mayoría de los expertos en TI están de acuerdo en que la interoperabilidad es la clave. Ser capaz de comunicar ambos protocolos, es la mejor y más lógica estrategia de transición. Para ello hay tres posibles soluciones técnicas: dual stack, tunnelling y translators.
Método de transición nº1: Dual stack
Es una de las técnicas más utilizadas, ya que puede ser utilizada en las diferentes partes de la red: equipos clientes, servidores y routers. Para que trabaje eficazmente, el dual stack debe ser implementado en todos los routers de la red. No habrá comunicación entre IPv4 e IPv6; sino que las aplicaciones tendrán que soportar ambos modos. El desafío con dual stack es que todos los equipos de la red han de contar la suficiente potencia de proceso y memoria, para gestionar dos pilas IP diferentes. Además, gestionar dos pilas IP supone un doble gasto en gestión y soporte, lo que incrementa los costes de TI.
Método de transición nº2: Tunnels
Esta es una técnica alternativa, que encapsula las comunicaciones de uno de los protocolos sobre el otro, estableciendo para ello un túnel de comunicación (similar a una VPN). Para ello necesitaremos contar con dual stack en cada uno de los puntos del túnel. Los routers involucrados en este método han de ser capaces de mapear las direcciones del contrario. La dificultad de ingeniería de este método hace que su desarrollo a gran escala sea de una complejidad extrema, y hará que para la mayoría de las organizaciones, se deba recurrir al soporte de ingenieros expertos ya sean internos o externos.
Método de transición nº3: Translators
Se trata de un desarrollo relativamente reciente, y ya se ha convertido en toda una revolución para la migración de los dispositivos. Una vez que fue considerada la herramienta de último recurso por la IETF (Internet Engineering Task Force), los esquemas de traducción están empezando a ser tremendamente populares a la hora de abordar muchas transiciones. La tecnología de traducción es utilizada cuando un único host IPv6 necesita comunicarse con otro IPv4 o viceversa. Este método de migración es la única de las soluciones en IPv6 que permite eliminar definitivamente el direccionamiento IPv4 de los nodos de red.
Esto ofrece ventajas muy significativas respecto a otras soluciones de migración, como por ejemplo, la posibilidad de integrar sistemas IPv6 nativos en redes que aún mantienen en soporte para dispositivos IPv4 más antiguos. Además, mantiene la seguridad punto a punto de la conexión. Un aspecto crítico de la tecnología de traducción es su enfoque single-stack, que reduce al mínimo la cantidad de hardware necesario (que funciona de manera nativa en IPv6 o IPv4), lo que reduce la cantidad de recursos de TI necesarios para mantener la red de datos.
El enfoque single-stack ofrece un modo simple y más económico, para manejar redes nativas en IPv6. Tan pronto como las aplicaciones IPv6 aparezcan, los departamentos de TI simplemente tienen que eliminar el viejo hardware IPv4 y reemplazarlo por otro nuevo con protocolo IPv6.